El canadiense James Hinchcliffe dice que ya está listo para olvidar la mala temporada que vivió en 2018 en la IndyCar
“Gracias a Dios, ese año ha terminado”, dijo James de 2018. Hinchcliffe empezó el año con una buena carrera en San Petersburgo terminando 4º. Terminó todas las carreras en el Top 10 hasta Indianapolis, carrera en la que no clasificó dos años después de hacer la pole en esa misma carrera. Después de eso, su nivel su nivel igualó al de principios de temporada, aunque resurgió en Iowa con una gran victoria. En Pocono vio como su amigo desde el karting y compañero, Robert Wickens se chocaba a 320 kilómetros por hora delante suyo. A partir de ahí no consiguió ningún Top 10.
“El marco de tiempo para mí es irrelevante”, dijo Hinchcliffe sobre el posible regreso de Wickens a las carreras. “No importa si son seis o 16 meses, es lo suficientemente joven, es lo suficientemente bueno, regresará a un coche y tendrá éxito nuevamente. Solo cúrate adecuadamente y consigue lo mejor que puedas.” Él insiste en que lo que le sucedió a Wickens nunca lo hizo cuestionar su posición en la IndyCar.
“Lo he estado diciendo durante un montón de años, estamos conectados de manera diferente, estamos mal conectados”, dijo Hinchcliffe sobre la mentalidad del piloto. “Nunca una vez me hizo detenerme y considerar mi propia carrera en ningún sentido. Sí, hubo días en que te sientas allí y piensas: ‘Hombre, desearía no haberlo convencido para que viniera a la Indy'”.
“¿Pero adivina que? Iba a venir, dijera algo o no. Superar esas cosas rápido. Te das la semana para pasar por ese tipo de cosas. Estoy haciendo lo que quiero hacer y estoy haciendo lo que Robbie quiere que haga, así que estamos en el camino correcto”.
A pesar de haberse perdido la Indy 500, el piloto de 32 años terminó la temporada en 10ª posición, siendo ese su tercer mejor resultado desde que entró en la IndyCar en 2011.
“Creo que la realidad se complicó unos cinco días después, cuando todos los demás estaban en el buen camino y nosotros no”, dijo sobre la Indy 500. “Sí, seguro, fue una píldora difícil de tragar”, añadió.
“Pero el mismo comentario sobre la adversidad se aplica directamente a esa situación. Ese grupo se unió tan fuerte. Pasamos por nuestro mejor tramo de la temporada justo después de eso: Texas, Road America, Iowa, estábamos en una buena racha”, continuó diciendo.
“Sabíamos que era circunstancial, era muchas cosas fuera de nuestro control, pero definitivamente hay muchas cosas de las que tenemos que responsabilizarnos. Pero sabemos lo que haríamos y no haríamos de manera diferente al regresar y no me preocupa volver. Sé que el ritmo va a estar allí, vamos a tener autos rápidos, vamos a tener buenos autos y vamos a salir y tratar de ganar los 500 “, comentó.
“Nunca te sientes cómodo financieramente en un equipo de carreras porque siempre encontrarás una manera de gastar los dólares que tienes, pero ahora tenemos mucho más dinero para gastar. Así que definitivamente se nos han brindado algunas oportunidades, en el lado del desarrollo, en el lado del personal, y eso solo puede ser algo bueno”, dijo para terminar.
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