Adiós a los elementos aerodinámicos en los prototipos

Todas las categorías importantes del automovilismo se han empeñado con cambiar sus reglamentaciones sobre el año 2021.

El Campeonato de Resistencia, o más conocido como el WEC, sigue dando pinceladas de cómo serán sus hipercoches en la temporada 2020/2021. Las conversaciones siguen dando mucho de que hablar, cada mes se hacen pequeños avances.

Se ha introducido otra novedad, de que los coches de carretera pueden competir junto a la nueva generación de prototipos y también en las 24 Horas de Le Mans 2020. Esto fue conseguido tras la presión de fabricantes como Aston Martin, McLaren y Ferrari.

La normativa original ya dejaba entrever que se iban a limitar los apéndices aerodinámicos de los prototipos. Según publica Motorsport.com, los dispositivos móviles no se incluirán en la nueva reglamentación, es decir no veremos DRS ni en la parte trasera ni delantera de los nuevos coches del WEC. Así lo habrían aprobado FIA y ACO.

Esto implica que los coches serán menos veloces, tomando referencia el circuito de Le Mans, la vuelta será entre cinco y seis segundos más lento.

El peso mínimo para todos los coches, ya sean prototipos o hipercoches de carretera, se establece ahora en 1150 kg, frente a los 1040 kg anunciados en las regulaciones publicadas el año pasado y el mínimo de 980 kg que se publicó cuando ACO y FIA dieron a conocer sus planes para los prototipos de hipercoches el pasado junio.

También se está buscando la manera de equilibrar los coches no híbridos e híbridos, si quiere introducir una regla que prohíba el despliegue del sistema híbrido en el eje delantero a menos de 120 kilóemtros por hora, algo que ya tuvieron los LMP1 en 2012/2013 y orientada a reducir la ventaja de correr con tracción a las cuatro ruedas.

Las nuevas propuestas contemplan un nuevo techo de 820 CV combinando el motor término y el sistema de recuperación de energía si nos referimos a los modelos híbridos. También se piensa que en los LMP1 se puede eliminar los límites de flujo de combustible, una normativa que se introdujo en 2014.