El piloto de Renault, Daniel Ricciardo cruzó la línea de meta en el noveno lugar, pero siente que han perdido una oportunidad.
Cuando se desplegó el coche de seguridad durante la carrera, el equipo decidió parar a Ricciardo, eso le costó cinco posiciones. De nuevo reviviendo situaciones pasadas en Mónaco, las paradas aquí son claves si lo comparas con otras del campeonato.
Cuando el Safety se fue, Ricciardo estaba encajado en la decimotercera plaza, mientras que grandes rivales ya estaban consolidados en posiciones más altas. “Recibí una llamada tardía en el Safety Car al box, y para ser honesto tan pronto como llegamos, mi intuición fue que no era la llamada correcta, porque los neumáticos estaban bien y teníamos el ritmo”.
“Hoy perdimos una oportunidad muy grande para obtener un quinto puesto, en el peor de los casos, un sexto. Así que sí, siéntate con los chicos ahora y entiéndelo, pero sí, ciertamente frustrado… Podríamos haber tenido un gran resultado hoy”, continuaba.
“Pienso que teníamos un buen coche durante la carrera, cincuenta vueltas con los medios e hice la mejor vuelta para estar dentro de la ventana por una penalización que arrastraba Grosjean”.
Pero no todo es sacar malas conclusiones de este fin de semana. Carlos Sainz ya aseguró que el salto del motor Renault se nota, ahora el australiano también lo confirma, sobre todo en clasificación.
“Tanto Nico como yo felicitamos a los chicos de Renault por el modo de clasificación, daba sensación de ser bastante potente. Mi referencia es del año pasado y claramente es mucho mejor. Incluso desde China, que fue nuestro último pequeño avance, se nota. Definitivamente tenemos un modo de clasificación real este año”.
Nico Hülkenberg también comentó algo parecido tras la carrera: “Me ha impresionado mucho y este fin de semana se podía sentir que el motor había vuelto a la vida de nuevo, ahora podemos luchar otra vez. Es un avance realmente grande, da una potencia considerable”.
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