El campeonato de la Fórmula E ha decidido exigir un peso mínimo para los pilotos de cara a la temporada 2020-21, la que será la séptima de la categoría eléctrica. El peso mínimo será de 80 kilos, la Fórmula E ha decidido copiar la estrategia que ha realizado este año por primera vez en su historia la Fórmula 1.
El reglamento refleja en gran medida la misma regla que se usa en la Fórmula 1 para dar una distribución masiva de los pilotos que varían en peso y altura. La normativa vigente estipula un peso mínimo de 900 kg para coche y piloto. Los pilotos varían ampliamente de 65 a 80 kg con su kit completo, con un asiento de 8 a 10 kg. El reglamento, que ya se acordó en gran medida, se formalizará el próximo año, antes de la temporada 2020-21 y verá un mínimo de 80 kg obligatorio para el piloto y el asiento.
Varios pilotos grandes y corpulentos como Lucas di Grassi o André Lotterer, se han visto obligados a realizar dietas especiales y entrenamientos con el objetivo de alcanzar los 75 kilos de peso mínimo que hay en la actualidad ya que no quieren tener un peso extra en su coche.
Di Grassi ha hablado sobre esta nueva normativa: “Estoy muy contento porque creo que es el camino correcto. Este tipo de regla debe ser acordada por todos, por lo que se necesita tiempo para confirmar. Por eso estoy contento, estoy contento de que al menos durante la temporada siete lo estén haciendo. Lo hace más justo como en la F1, todos están más o menos en la misma redistribución, en la misma masa, por lo que solo puede ser bueno”.
Para la temporada 2019-2020 el peso mínimo continuará siendo de 75 kilos. No obstante, los pilotos más pesados tendrán una oportunidad de evitar las dietas a partir de la temporada 2020-2021. Algo que les puede haber perjudicado durante estos años, ya que nadie quiere estar más delgado de lo normal.
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