Daniel Ricciardo piensa que Lance Stroll debió ser sancionado por haberle echado fuera de la pista en el Gran Premio de Estiria. El australiano asegura que el de Racing Point no debería haberse ido de rositas tras haberlo adelantado de mala manera, y sostiene que el canadiense se acabó desesperando tras no haberle podido ganar la posición durante tantas vueltas.
Ricciardo añade que debió de haber sido más duro. El australiano no le cerró la puerta en el momento del adelantamiento y por ello lo echó fuera de la pista. Además, también ve como algo destacado el hecho de que Lando Norris llegase a la cola de ambos en el tramo final. Ese hecho fue el que precipitó la maniobra de un Stroll que sigue muy verde a la hora de ganar posiciones en carrera.
“Primero de todo, me echó fuera de la pista. Eso sí, tengo que ser crítico conmigo mismo y reconocer que debía haberle cerrado la puerta, aunque no pensaba que me iba a acabar adelantando en ningún momento. Su movimiento fue a la desesperada, veía a Lando venir y sabía que si no me adelantaba se lo iba a comer”, ha comentado Ricciardo.
Ricciardo piensa que Norris iba a acabar superando a ambos de todas formas. No obstante, asegura que es una lástima que una carrera acabe con un incidente de carrera así, en el que perdió dos posiciones de golpe. El australiano sostiene que sus formas de adelantar ni mucho menos fueron las correctas, dado que para ello tuvo que echarlo fuera de la pista.
“Cogí el vértice y me echó fuera de la pista, fue algo frustrante, pues también perdimos la posición con Lando. Creo que Lando nos hubiese adelantado igual, pero es una pena acabar de esa forma una carrera”, explica el australiano para terminar.
Cabe recordar que Ricciardo no ha sido el único piloto que se ha quejado de las formas de pilotar del mismo Stroll. El pasado año Pierre Gasly, tras el Gran Premio de Abu Dabi criticó su falta de cuidado en las salidas y aseguró que era muy probable tener un incidente con él. Además, el mismo Fernando Alonso en 2018 explicó que era un piloto muy complicado con el que competir, dado que perdía el control en demasiadas ocasiones.
