Un año más, Carlos Sainz tiene la mente puesta en disputar un nuevo DAKAR y ganar el tercero en 2020.
En unas declaraciones para Motorsport.com en el pasado Gran Premio de Italia, donde el español estuvo apoyando a su hijo, aseguró que las negociaciones con MINI para volver a subirse al X-Raid buggy van por buen camino.
Con MINI podría disputar su segundo DAKAR, mientras que se ha hablado de una posible participación con Toyota, quizás la intención de Fernando Alonso de correr la gran prueba haya frenado sus posibilidades.
“Estoy esperando a llegar a un acuerdo con MINI. Ya sabes que es básicamente el mismo coche que el año pasado. Seguirá siendo con Red Bull y estamos tratando de ver si podemos cerrar el contrato”, decía el doble campeón Mundial.
“Creo que necesitamos saberlo como máximo la semana que viene, porque obviamente queremos hacer Marruecos, como siempre. Marruecos es la primera semana de octubre y tiene que estar todo listo para entonces, decidido y preparado”, continuaba.
La firma con MINI no se ha completado porque se busca un patrocinador importante: “Sí, estamos buscando la entrada de un gran patrocinador para cerrarlo todo. Y creo que esto debería llegar a comienzos de esta semana”, algo que aún no ha sucedido.
En el Rally de Marruecos, él y Lucas Cruz usarán el mismo para desarrollar algo más el coche. Para, al menos, evitar lo sufrido en el DAKAR este 2019: “Es el coche que usamos el año pasado sin grandes éxitos, pero creo que el año pasado fue… tuvimos un gran problema con el sistema de inflado-desinflado. Creo que el coche ha sido evolucionado y lo probamos un poco hace un par de semanas. Creo que el equipo está realizando nuevas mejoras para el próximo evento en Marruecos, si es que vamos. Y deberíamos ser más competitivos que el año pasado”, finalizaba.
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