Hace cuatro días, una nueva estructura anunció su entrada en la categoría. El proyecto, dirigido por el ex-piloto de IndyCar Robbie Buhl y su socio Robert Citrone, empieza a andar con el objetivo de participar en el GP de Indianápolis y las 500 millas.
La estructura surge a partir de Buhl Sport Detroit, entidad creada por Buhl en 2016. Este proyecto incluye un equipo de RallyCross y varias empresas relacionadas con el motorsport. Robert Citrone cuenta también con una importante empresa (Discovery Capital Management) y una cantidad de dinero que ha hecho posible esta iniciativa. De momento, el equipo no ha anunciado el piloto que ocupará su monoplaza ni el patrocinador para la participación, pero se espera que lo hagan próximamente.
Robbie Buhl es un personaje influyente en IndyCar. En su etapa de piloto, ganó las Indy Lights en 1992 y fue subcampeón en 1995 tras dos años no muy exitosos en la CART. Tras la separación entre Champ Car e Indy Racing League, Buhl se aventuró en esta última, quedando tercero al final de la temporada 1996 en la que, eso sí, se disputaron tan solo tres carreras.
Continuó en IRL con Team Menard donde consiguió una victoria en New Hampshire y varios podios, y un año en AJ Foyt. Tras esto, en el año 2000 fichó por Dreyer y Reinbold, para los que consiguió una victoria en su debut en Disney World. En 2004 se retiró de la categoría y en 2007 empezó su carrera como comentarista de IndyCar e Indy Lights, a lo que dedicó dos años de su vida.
De momento son 31 los coches confirmados para las 500 millas con la incorporación de Citrone-Buhl, con pilotos como Fernando Alonso todavía sin equipo. Además, faltan anuncios como el piloto del segundo coche de Carlin o el piloto que ocupará el coche de Max Chilton en ovales, por lo que las alineaciones no están ni mucho menos cerradas.
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