El departamento de Seguridad de la FIA sigue trabajando constantemente para hacer lo más seguro posible el automovilismo, ya que los accidentes que se sufren a estas velocidades pueden resultar fatales.
La FIA ha investigado los accidentes que tuvieron lugar durante el 2019 en las carreras junto al apoyo de la ASN (Autoridad Deportiva Nacional). Tras ello, han asegurado que la próxima generación de automóviles para carreras encontrarán nuevas innovaciones, también habrá cambios en los circuitos, nuevas herramientas y mejores prácticas.
Nuevas medidas en los monoplazas
Hace unos años, la FIA implantó unos anclajes que evitaban la expulsión de las ruedas al sufrir un accidente. Ahora, se quiere hacer con diferentes escombros que pueda soltar el automóvil durante un accidente. Se desarrollarán soluciones técnicas para asegurar que los grandes escombros se retengan en el coche.
No se olvidan de los desechos más pequeños, se investigará la construcción de materiales compuestos específicamente diseñados para ayudar a reducir el desprendimiento de estos elementos.
La FIA centra su trabajo en revisar las estructuras de impacto frontal y lateral con el objetivo de absorber el total de la energía durante un impacto, el rendimiento direccional y la compatibilidad. Para garantizar la compatibilidad entre las estructuras de impacto y la célula de supervivencia, la revisión incluirá cambios en la especificación de la resistencia de la célula de supervivencia al impacto frontal y lateral según sea necesario.
En cuanto al alerón delantero se habla de la fijación a la nariz del monoplaza. Se desea que no haya tanta perdida de elementos poniendo en peligro la seguridad del piloto. En la próxima generación de monoplazas se considera que las partes exteriores de ala delantera si pudieran desprenderse, pero no la parte principal del alerón. Por último, en cuanto al reposacabezas, este se diseñará para que no se desprenda en caso de accidente, tampoco después de haberlo sufrido.
Sistemas electrónicos
Todos tenemos en mente la luz trasera de los monoplazas que sirve, principalmente para la lluvia, y actualmente para ver que ese coche está ahorrando energía. Bien, el primer paso que se considera es que los pilotos vean la repetición de la bandera amarilla en esa luz cuando esta se despliegue.
Por otro lado, se estudia, pero más a largo plazo, incorporando características como la generación automatizada de banderas amarillas, notificación directa de coche a coche sobre otros coches en posición peligrosa e incluso una posible reducción de velocidad tras un incidente.
Al conductor se le deberá dar información de estado de sus neumáticos para evitar la perdida del coche en caso de pinchazo. Esta incluiría la presión de los neumáticos, por lo que podría reducir la velocidad si detecta algún problema antes de un mal mayor. Para lograr esto, la tecnología de monitoreo y reporte de presión de neumáticos se desplegará en un número más amplio de categorías. Ya se han iniciado acciones para implementar dichos sistemas en FIA Formula 2 y FIA Formula 3 para la temporada 2020.
Cambio en los circuitos
Se plantean nuevas investigaciones y pruebas para optimizar el rendimiento del impacto de barrera para ángulos de muy bajo impacto, específicamente para los que oscilan entre 0º y 20º.
El circuito de Paul Ricard es un claro ejemplo de lo que quiere la FIA. Unos nuevos sistemas para que el automóvil reduzca la velocidad lo más rápido posible cuando se salga de pista, como superficies antideslizantes y de alta fricción. Se centrarán en nuevas soluciones para controlar los límites de la pista y se pondrá más énfasis en las incorporaciones peligrosas que se han visto en numerosas ocasiones este año.
El documento finaliza haciendo énfasis en los paneles de luz que se instalan en el trazado para garantizar que todos los circuitos tengan una infraestructura electrónica adecuada en la vía para alertar a los conductores sobre incidentes en la vía. Esto contará con el respaldo de las nuevas Directrices del sistema de clasificación de la FIA, en cascada las mejores prácticas de los campeonatos FIA F1 / F2 / F3 para garantizar una comunicación efectiva entre el Control de carrera y los autos en la pista.
