Kimball, la nueva esperanza de Foyt en la IndyCar

Charlie Kimball entrando en su monoplaza. Genesis 300. Indycar. Foto: Indycar.com.

Charlie Kimball, piloto del equipo Foyt en la IndyCar, volvió a la acción con la reanudación de la competición en la Genesis 300. Se trata de un piloto veterano que se ha convertido en la nueva esperanza del equipo.

Foyt lucha para volver a la senda de las victorias, ya que en los últimos años, ha entrado en una rutina de no terminar de cerrar la temporada con buen sabor de boca. Ahora el equipo, que considera este 2020 como un año de transición, quieren arrancar un proyecto potente, con Kimball al frente. El piloto estadounidense hizo un buen papel en la Genesis 300 aunque el resultado final no le acompañase. Kimball superó con creces la presión a la que estaba sometido y es la nueva esperanza en Foyt.

Buena imagen ofrecida en la Genesis 300

Kimball salió luchador desde el principio, sabiendo que en Texas, el público estaba apoyando a su equipo, añadiendo más presión a la situación. El piloto luchó por mantenerse entre los diez primeros, e incluso consiguió colocarse entre los cinco primeros pilotos de la carrera. Sin embargo, un error de cálculo en la gestión del combustible de su monoplaza, y un toque con el muro, sentenciaron su carrera y terminó cruzando la línea de meta en undécimo lugar, justo por detrás de su compañero de equipo.

El piloto estadounidense dio un buena imagen y a pesar de que no consiguió terminar en el TOP10 en Texas, el equipo salió del evento satisfecho por el papel de Kimball.

Larry Foyt, presidente del equipo, se deshizo en halagos hacia Kimball tras su actuación en la Genesis 300:

“Charlie aporta una gran experiencia al equipo. Está motivado para demostrar de lo que es capaz al volante y nos ayudará a desarrollar un monoplaza que vaya subiendo puestos en la parrilla.”

El objetivo del equipo era arrancar la temporada de forma sólida, y a pesar de haber obtenido el 10º y el 11º lugar en la Genesis 300, se considera que los objetivos se cumplieron. De hecho, los resultados obtenidos, superan con creces los que consiguieron en 2019, cuando los pilotos de entonces, que corrína para Foyt terminaron 16º y 22º.

El próximo evento es el GMR Gran Prix, que tendrá lugar en Indianápolis. Kimball asegura que se preparará para correr bajo altas temperaturas, en pleno mes de julio. Se tratará de una nueva prueba de juego para el piloto estadounidense. Por ahora, es la nueva esperanza de Foyt.