El pasado GP de Hungría y su salida sobre mojado le dio bastante trabajo a los comisarios de carrera. Hasta tres investigaciones relacionadas con la salida dieron de qué hablar durante todo el Gran Premio e incluso al finalizar el mismo.
Suele pasar que cuando hay investigaciones esté involucrado algún piloto del equipo Haas y de hecho, en este caso, ambos lo están. Tanto Kevin Magnussen como Romain Grosjean recibieron una sanción de 10 segundos, aunque en esta ocasión ellos no fueron culpables, ya que el equipo les indicó en la vuelta de formación que entraran a cambiar neumáticos. Todas las conversaciones entre el equipo y el piloto que no tengan que ver con cuestiones de seguridad están prohibidas durante la vuelta de calentamiento y esta indicación no iba ser menos.
Masi fue muy claro con este tema ya que es algo que no deja lugar a dudas en el reglamento.
“Hubo una directiva técnica que salió en 2017 aclarando qué comunicaciones hace la cabina del equipo a los pilotos en la vuelta de formación, que se relaciona con el Artículo 27.1 de las regulaciones deportivas, que es que el piloto debe conducir el coche solo y sin ayuda. Parte de esa convocatoria es que ambos pilotos fueron llamados por sus ingenieros para cambiar los neumáticos en la vuelta de formación, lo que no está permitido dentro de la directiva técnica que se emitió en ese momento sobre lo que puede y no puede [decirse]. En términos esenciales, la única comunicación que se puede hacer con el piloto durante la vuelta de formación es sobre cuestiones de seguridad, por lo que si se trata de un problema de seguridad inminente, esa comunicación puede tener lugar”, aseguró Masi en declaraciones a Motorsport.com.
Valtteri Bottas fue el protagonista de otra peculiar investigación. El piloto de Mercedes se saltó la salida, aunque de manera muy tímida, ya que se percató del error y frenó para no ganar ventaja. Esto le hizo perder varias posiciones en la salida incluso. Masi explicó que en estos casos hay cierta tolerancia como ocurrió con Vettel en Japón el año pasado y tras revisar los sensores de la pista y del coche no vieron conveniente ejercer ningún tipo de penalización.
“Hay dos partes en eso. El medio por el cual se determina un arranque en falso se explica claramente en las reglamentaciones deportivas, y ha sido el mismo proceso durante varios años, que es el transpondedor que se ajusta a cada coche es el mecanismo de juicio. También hay un sensor en la pista. Así que no había nada más que echar un vistazo. Hablamos con los cronometradores de inmediato, revisaron todos los datos, y ese fue el final del asunto“, explicó el director de carrera.
Pero, sin duda, la investigación más extraña que se vivió el pasado domingo fue la que se le hizo al equipo Red Bull y a Albon. Se les acusaba de haber secado la posición de salida del coche de Albon antes del inicio de la prueba. Finalmente se demostró que no lo hicieron y no recibieron sanción alguna. El propio Masi afirmaba que se trataba de algo un poco más inédito y que por eso le dedicaron más tiempo a su investigación.
“Los comisarios investigaron y consideraron que no había más acciones necesarias. Se recibió un informe, los comisarios lo investigaron y obviamente querían investigarlo adecuadamente, por eso esperaron hasta después de la carrera, porque es algo bastante extraño, digamos. Hicieron su proceso adecuado para asegurarse de que no fue algo que ocurrió“, finalizó el director de carrera.
