La temporada de Racing Point es, hasta la fecha, agridulce. El RP20, más bien conocido como el ‘Mercedes Rosa’, ha demostrado ser un monoplaza con un ritmo superior al resto de rivales de la zona media. Sin embargo, esta ‘superioridad’ no se ha visto recompensada de manera proporcional. Tras un decepcionante Gran Premio de Gran Bretaña, la escudería británica busca convertir el buen ritmo en puntos.
A la espera de saber si Checo Pérez estará disponible para disputar el GP, las miradas están puestas en Nico Hülkenberg y Lance Stroll. El piloto alemán no tuvo ni la posibilidad de empezar la carrera la semana pasada, mientras que el canadiense decepcionó a todos debido al mal ritmo que mostró. En un coche que se intuye tan rápido, lograr solo dos puntos es un claro aviso para todos los miembros del equipo.
Lance Stroll
El joven piloto no pudo demostrar en el GP de Gran Bretaña que puede estar capacitado para liderar a Racing Point. Ocupó las cinco primeras posiciones en cada una de las sesiones de libres, pero en el momento de la verdad fue sobrepasado por el resto de rivales, sobre todo en carrera. El propio Stroll se sintió decepcionado tras su actuación.
“Mantuvimos nuestra racha de puntos, pero la P9 es una mala posición. Debemos centrarnos en el próximo fin de semana y asegurarnos de que volveremos más fuertes para demostrar de lo que es capaz el coche”, declaró Stroll tras la carrera.
Nico Hülkenberg
La mala suerte acompaña al alemán, que no pudo ni siquiera empezar la carrera en Gran Bretaña. Si la salud de Checo lo permite, Hülkenberg se volverá a subir al monoplaza, y esta vez con más tiempo de preparación. Tras meses de inactividad, el ex de Renault demostró que sigue siendo rápido, aunque se quedó en la Q2 en clasificación, a una décima del tiempo de salvación.
Tras la carrera en Silverstone, el alemán se mostró decepcionado por ese problema que le impidió correr. “Hubiera sido genial lograr un buen resultado en la carrera como recompensa por todo nuestro duro trabajo”, mencionó Hülkenberg.
