Mattia Binotto, jefe del equipo Ferrari, confía en que las actualizaciones del SF1000 van a funcionar. La escudería italiana ha introducido un paquete de mejoras durante las dos últimas carreras.
Más que una mejora de rendimiento, los de Maranello han intentado que el trabajo en la fábrica y el trabajo en pista fluyan en la misma dirección. “No esperábamos mucha diferencia. Fue una pequeña actualización que completaba un paquete que introdujimos en Rusia”, dijo Binotto. Charles Leclerc logró un meritorio cuarto puesto en la clasificación del GP de Eifel, pero finalizó la carrera en séptima posición debido a la degradación de sus ruedas. A pesar del resultado, Binotto declaró que está “esperanzado, porque parece que el equipo está avanzando y entendiendo mejor el coche”.
Binotto valoró positivamente la correlación entre lo realizado en el túnel de viento y en la fábrica, lo que indica “que el coche va en la dirección correcta”. El jefe de Ferrari también anunció que habrá más mejoras en esta temporada, y que serán importantes. “Para nosotros, la clave es que el equipo desarrolle el coche, y lo más importante, asegurarnos de que el camino por el que llevamos el monoplaza es el indicado”.
Tras revisar los datos del GP de Eifel, Ferrari encontró algunos aspectos positivos. “No esperábamos ser tan competitivos, aunque el coche, con un clima tan frío, fue bastante bien”, reconocía Binotto. Las pequeñas actualizaciones funcionaron, y a pesar de que no produjeron un gran salto competitivo, en Ferrari se mostraron satisfechos.
“Fue un pequeño paso en la dirección correcta. Ahora tenemos que entender por qué en el primer stint con neumáticos blandos tuvimos tanto graining”, confesaba. “Pero aún así, estoy bastante satisfecho con cómo ha ido el fin de semana en Nürburgring”. Ferrari es actualmente sexto en el mundial de constructores con 80 puntos, en la peor temporada de su historia reciente.