La temporada de Ferrari ha ido de mal en peor. Al principio ya pudimos ver que estaban lejos de sus teóricos rivales (Mercedes y Red Bull), pero, especialmente Leclerc, pudo maquillar la situación con dos podios en Austria y Silverstone y un cuarto puesto en la segunda carrera del trazado inglés. Sin embargo, desde aquel momento la trayectoria de los italianos ha sido descendente a pasos agigantados, y solo las genialidades del monegasco han permitido a la Scuderia conseguir puntos esporádicos.
Sin embargo, desde Italia quieren poner fin a esta situación, y prueba de ello es que van a gastar todos sus tokens disponibles en una nueva parte trasera que empezaremos a ver a partir de este Gran Premio de Portugal. De esta manera, resulta previsible que Ferrari esté algo más competitiva este fin de semana. Además, el circuito de Portimao no es precisamente el que requiere de una mayor velocidad punta y eso puede beneficiar a los de Maranello.
Charles Leclerc
El piloto monegasco es quien está sacando las castañas del fuego en gran medida al equipo rojo. Pese a que, obviamente, no puede hacer milagros, ha podido sacar la quintaesencia del coche tanto en clasificación como en carrera. En las últimas carreras está sufriendo más debido al bajón de rendimiento del monoplaza, pero se ha exhibido en clasificación y ha aguantado el tipo como ha podido en carrera.
Siguiendo en la línea de sus últimas actuaciones, se espera que el piloto monegasco pueda estar luchando por un lugar entre las 10 primeras posiciones de la parrilla y pueda conseguir una buena cantidad de puntos el domingo:
“Veremos a ver a dónde podemos llegar este fin de semana. El coche funciona bien con poca gasolina pero, sin embargo, le cuesta mucho más en tandas largas. En Mugello sucedió y en Nürburgring ocurrió de lo mismo. Veremos si las mejoras funcionan y podemos ser más competitivos este fin de semana. Las temperaturas van a ser mucho más cálidas este fin de semana, además, con lo que veremos como se comporta el coche con las nuevas condiciones.”, ha comentado Leclerc, con esperanzas de poder mejorar las prestaciones del monoplaza este fin de semana.
Sebastian Vettel
Si la temporada de Charles Leclerc ya está siendo complicada, la de Vettel llega a unos niveles casi inauditos para un piloto de Ferrari en mucho tiempo. Comentamos que Leclerc está sufriendo enormemente para traer resultados interesantes a Italia, pero es que Vettel lleva sin puntuar desde Mugello y sin tener una actuación que se pueda considerar decente para su nivel, desde el Gran Premio de España en agosto.
Si puede ser esperable que Leclerc pueda dar un salto adelante con las mejoras en el monoplaza y pueda optar, incluso a luchar por el TOP5, Vettel es probable que tenga que conformarse con objetivos más modestos. Poder pasar a la Q3 el sábado y rodar cerca de su compañero de equipo el domingo podría considerarse ya un éxito para el alemán.
“Nunca he corrido en Portimao, pero me he estado mirando el perfil del circuito y hay muchas curvas ciegas y muchos cambios de elevación, con lo que parece ser un circuito interesante. Intentaré dar el máximo de vueltas posible durante los entrenamientos libres para poder familiarizarme con el circuito lo antes posible“, ha declarado el piloto alemán.
“De cara al año que viene no se puede llevar a cabo modificaciones importantes en los monoplazas, pero sí que tenemos dos tokens para poder evolucionar aquellas áreas con más carencias. Creemos que la parte donde tenemos más margen de mejora es en la zona trasera del monoplaza, con lo que hemos gastado los dos tokens allí. Con total seguridad nos podrá ayudar a dar un salto adelante importante. Las mejoras se irán introduciendo progresivamente durante lo que queda de temporada“, ha asegurado el jefe de rendimiento de Ferrari, Enrico Cardile.
De esta manera, Ferrari busca poder dar un salto adelante pero se avecina complicado que pueda colarse entre los cinco primeros tanto en clasificación como en carrera. Buscarán poder sumar puntos para no perder comba ante McLaren, Renault y Racing Point y, tal vez aprovechar algun regalo venido del cielo el domingo, ya que la lluvia podría hacer acto de presencia.