La peor clasificación de Carlos Sainz bajo la lluvia ha sido la de Turquía y la querrá olvidar pronto. El madrileño siempre ha ido bien en estas condiciones de húmedo, la historia más reciente la tenemos en la salida del Gran Premio de Portugal.
Fue complicado mantener en coche en pista y tener los neumáticos en una temperatura correcta para hacer una vuelta limpia. McLaren ha sufrido en el segundo aspecto, algo que se veía durante los terceros entrenamientos libres.
En primer lugar, Sainz confirmó que perdieron mucho tiempo a la hora de elegir un neumático: “Una clasificación muy rara, poco grip en pista y hemos estado toda la clasificación intentando saber cuál era el neumático correcto. Nos dimos cuenta a mitad de sesión que nos equivocábamos con el intermedio y con el de lluvia extrema era mejor”.
Tampoco consiguió poner en la ventana correcta los neumáticos de lluvia de Pirelli. Sorprendido por haberse quedado tan lejos en unas condiciones que siempre disfruta: “No pude mejorar lo suficiente. No hemos calentado el neumático como queríamos. En mi vida me he quedado a seis segundos en agua”.
No se espera lluvia de cara a la carrera, por lo que Sainz es optimista para remontar algunas posiciones, aunque el sufrimiento con los neumáticos no cesará: “No hay nada que se pueda hacer. Estamos preparados para mañana, vimos con la goma dura que nos costó calentarlo y somos los que más sufríamos. Si está seco podremos remontar un poco”.
Finalmente, Sainz saldrá desde el decimosexto lugar al confirmarse la penalización de tres puestos en parrilla por obstaculizar a Sergio Pérez durante la segunda sesión de clasificación. El de Mclaren, antes de la decisión, decía: “Espero que los comisarios tengan en cuenta que ha sido una sesión rara, no veía apenas con la lluvia e intentando calentar los neumáticos. Tenía los espejos tapados, no podía hacer nada”. Los comisarios han pasado todo esto por alto.
