Este Gran Premio de Abu Dabi marca el fin de una era en la Fórmula 1. Renault dice adiós tras dos Mundiales de Pilotos y Constructores, 35 victorias y 399 carreras para dar la bienvenida a Alpine F1.
La marca francesa ha querido despedirse de la mejor manera. Fernando Alonso forma ya parte del equipo, antes de ser piloto titular junto a Esteban Ocon en 2021, por eso mismo no han querido desaprovechar la oportunidad de juntar al asturiano con el R25, coche con el que fue Campeón en 2005 con primera vez.
Ambos dieron la gran alegría a Renualt siendo un coche muy recordado en la historia de la Fórmula 1 con el icónico motor V10, el cual fue dominante entre los años 90. Tras quince años, el R25 ha pasado por las instalaciones de Enstone, Viry y la compañía Rennwek alemana para trabajar en su restauración y así poder rodar con él en Abu Dabi durante los tres días del fin de semana en diferentes carreras de exhibición. Este proyecto de restauración comenzó en 2018, desde una exhibición en 2006 no ha vuelto a rugir.
El plan inicial de Renault era poner en pista al R25 en el Gran Premio de Francia 2020, pero el COVID impidió llevar a cabo esta idea. El primer arranque llegó en octubre de 2020, fueron necesarias más de 50 horas de revisión del motor en Viry. Solo dos semanas después, el V10 cobró vida en el taller de Rennwerk y, a mediados de noviembre, el R25 había completado una asombrosa primera carrera en el circuito de La Ferté Gaucher en las afueras de París.
Al confirmarse los planes, Cyril Abiteboul ha comentado lo siguiente: “Es muy emotivo ver al R25 correr con rabia una vez más, y tener a Fernando al volante es la guinda del pastel. La asociación coche-conductor fue un clásico en la F1 y sigue siendo uno de los logros de los que más se enorgullece Renault en el deporte del motor. Por supuesto, cualquier resultado ahora estará bajo el nombre de Alpine, pero nuestro éxito futuro será un homenaje a este momento increíble en la historia de Renault en la F1”.
