El presidente del Grupo Renault, Luca De Meo, ha admitido que Alpine no espera grandes resultados este año, sino que tiene sus ojos puestos en 2022. La escudería francesa afrontará esta temporada como un año de transición, tal y como ya declaró Fernando Alonso. El asturiano ya dijo en su día que, en 2021, “solo Hamilton y Mercedes pueden ganar” y que muchos, incluido él, estaban esperando a 2022. “Estaremos bien preparados y queremos luchar cuando entre el nuevo reglamento. Aunque no es seguro”.
Alpine tendrá una competencia feroz para repetir los éxitos de este año. Ferrari no estará tan hundida como en 2020, Aston Martin calcará de nuevo el W11 y McLaren vuelve a estar motorizado por Mercedes. “Para nosotros, el 2021 es un año de transición. Nos vamos a centrar sobre todo en el reconocimiento de la marca, que aparecerá habitualmente en los medios”.
A pesar de haber conseguido sus primeros podios en 2020 tras su vuelta hace cinco temporadas, Renault no tiene como objetivos repetirlos este año. “En 2022 esperamos subirnos al podio regularmente, e incluso ganar alguna carrera”, declara De Meo.
“La Fórmula 1 para Renault es la historia del Alpine. Llevamos 43 años en la competición. Para nosotros, Alpine es sinónimo de deporte, competición y la excelencia tecnológica de Renault. Queremos que en la calle nos identifiquen como una marca deportiva, pero de cero emisiones”, dice el presidente del grupo galo.
Luca De Meo ha revolucionado el Grupo Renault con su llamada “Renaulución”, en la que busca cambiar por completo la imagen y la producción de la marca del rombo. Uno de esos cambios que se ha producido ha sido la denominación del equipo de Formula 1 a Alpine.
La escudería francesa también ha cambiado de jefe de equipo, ya que a Cyril Abiteboul le sustituirá Davide Brivio, antiguo director de Suzuki en MotoGP. Estos cambios, sin lugar a dudas, son prometedores para los de Enstone, pero siguen siendo realistas y por eso Alpine no espera grandes resultados. Saben que su verdadera oportunidad está el año que viene.
