La Fórmula E y la FIA impondrán sanciones económicas a los fabricantes que abandonen la categoría eléctrica durante la era de los Gen3. Si abandonan la serie deberán pagar los 300.000 euros de la inscripción y homologación hasta 2026, año hasta el que seguirán vigentes las normas.
A partir de la temporada 2022-2023 y hasta 2026 entrarán en vigor los Gen3, un nuevo conjunto de reglas que permite ampliar la potencia de los coches hasta los 350 kW; el peso se reduce a 120 kilogramos.
En las normas han publicado un nuevo artículo que implica sanciones económicas para los fabricantes que se marchen. Esto implica tener que abonar los 300.000 euros de la inscripción y la homologación hasta que finalice el ciclo de los Gen 3. Además, deben pagarlo en los 60 días siguientes a la fecha en la que anuncien su salida.
“En el caso de que un fabricante se retire del Campeonato antes de que termine el ciclo, la única responsabilidad del fabricante y el remedio exclusivo de la FIA para tal retiro será pagar la tarifa de inscripción y homologación del Campeonato del Mundo hasta el fin del ciclo, a pagar en una sola cuota dentro de los 60 días a partir de la fecha efectiva del retiro“, reza el artículo 7.4 del reglamento.
Además, añaden que el fabricante será el único responsable de cualquier consecuencia directa sobre los equipos a los que suministra. Esta decisión se ha podido ver motivada por la decisión que Audi y BMW tomaron el pasado mes de diciembre de abandonar la categoría eléctrica al término de la temporada 2021.
Precios de suministro a clientes
La Fórmula E y la FIA también han concretado el precio a pagar por parte de cualquier equipo que desee adquirir el tren motriz de otro fabricante. En un primer momento, la cifra ascendía a 835.000 euros, ahora ha aumentado en 195.000 euros por la renovación de la batería.
Además, el precio máximo por elementos como la suspensión, el tren motriz o la transmisión ha aumentado en 200.000 euros, situándose en 427.300 euros.
