Para tener su primera experiencia sobre las cuatro ruedas, Laia Sanz se ha desplazado a Dubái para disputar la Baja con el buggy del equipo South Racing. Además, con la mejor compañía, Lucas Cruz.
La catalana se está preparando para debutar en la Extreme E, la primera edición será en Al Ula, Arabia Saudí. Ese Odissey 21 no tiene nada que ver con el SSV que ha probado en esta prueba, pero los más 400 kilómetros que ha recorrido serán de gran ayuda.
Su lugar en la general ha sido el cuarto, tras ser segunda en el último día de la Baja a tres minutos de Alsaif, que fue el vencedor. El vencedor de la categoría T4, donde participaba Laia, ha sido el ruso Lebedev y se ha quedado a hora y media. Durante el primer día rompieron el palier, por lo tanto, perdieron minutos valiosos.
“Estoy muy contenta. Hemos cumplido el objetivo que era entrenar, hacer kilómetros, aprender cómo pilotar en dunas y a escuchar al copiloto, algo nuevo para mí. Agradezco a Lucas su gran trabajo”, ha dicho Laia tras terminar la Baja en declaraciones que recoge AS.com.
Sobre la última etapa, comentaba: “Hemos roto la correa en el kilómetro 62 y hemos perdido unos 6 o 7 minutos al cambiarla, pero el ritmo ha sido muy bueno y hemos conseguido un buen resultado. Me voy con muy buenas sensaciones”.
Laia Sanz está de gracia a pesar de haber tenido un 2020 complicado por su enfermedad. Terminó su undécimo Dakar en motos y fue confirmada como compañera de Carlos Sainz en el equipo ACCIONA Sainz de la Extreme E. Esta pareja será una de las favoritas para llevarse el campeonato, sin duda. Ambos han tenido una breve experiencia en MotorLand en un test oficial, la próxima vez que se encuentren será en Al Ula.
