Red Bull se está preparando para desarrollar su propia unidad de potencia en 2025, cuando lleguen las nuevas regulaciones en la Fórmula 1. El equipo ve con buenos ojos sumergirse en el proyecto de crear sus propios motores tras la congelación de motores hasta 2024, lo que le permitirá hasta entonces seguir utilizando las unidades de potencia de Honda. A partir de ese momento, Red Bull quiere desarrollar sus próximos motores.
El reciente acuerdo entre Red Bull y Honda, le permitirá al equipo adquirir la mayor parte de la operativa Honda Racing Development. Un hecho que se ha convertido en clave para que Red Bull termine desarrollando sus propios motores en 2025.
No se descarta un posible acuerdo con un fabricante
Christian Horner, director de Red Bull en la Fórmula 1, asegura en declaraciones a RaceFans que la máxima prioridad del equipo es terminar desarrollando su propias unidades de potencia, ajustándose al reglamento que entrará en vigor en 2025.
Sin embargo, no se cierran puertas a posibles acuerdos con fabricantes que presenten una interesante propuesta sobre la mesa. Red Bull de todas maneras busca independizarse, ya que desde que llegó a la Fórmula 1 en 2005, siempre ha tenido que depender de un fabricante de unidades de potencia.
«Tenemos la capacidad de crear nuestros propios motores y no estaríamos en deuda con ningún fabricante. Obviamente si aparece un socio interesante, deberemos considerarlo y valorarlo. El hecho de heredar la gran parte de Honda Racing Development, significa contar con un buen punto de partida».
Para Horner, llegar a desarrollar sus propios motores en 2025, es el gran compromiso y reto que tiene Red Bull por delante. Se trataría de un paso estratégico importante que podría determinar el destino de la escudería en un futuro. Además, Red Bull alcanzaría el estatus de los gigantes de la Fórmula 1: Mercedes, Ferrari y Renault.
Por ahora, Red Bull ha creado la nueva compañía denominada Red Bull Powertrains Limited y más allá de trabajar juntamente con Honda para el motor de 2021, adquirirá la potestad de operar libremente con las unidades de potencia del fabricante japonés de 2022 hasta 2024. En 2025, Red Bull debería dar el paso definitivo para crear sus propios motores.