El Gran Premio de Emilia Romagna será el segundo de Fernando Alonso en su regreso a la Fórmula 1. El piloto asturiano llega con buenos recuerdos por sus logros en el pasado, pero también siendo consciente de que deben extraer más rendimiento del monoplaza.
Imola es una pista que le trae buenos recuerdos a Alonso, pues allí consiguió una importante victoria en 2005 tras aguantar detrás a Michael Schumacher durante más de 11 vueltas. Por este motivo reconoce que ganar en Italia con Ferrari es muy especial, pero ganarle a un Ferrari también lo es.
“Es especial, no solo para mí, para el deporte en general. Imola es uno de esos lugares con mucha tradición, mucha historia. Todos echamos de menos a los tifosi en una carrera en las que era increíble venir, ver las gradas rojas... Intentaremos hacer una buen carrera igualmente”, ha afirmado en la rueda de prensa previa al fin de semana.
“Nunca es bueno terminar por delante de un Ferrari en Italia, es lo opuesto a cuando ganas con Ferrari en Italia, que es una de las mejores cosas que te pueden suceder. Recuerdo 2005, también 2006, donde sucedió lo opuesto. La emoción en Italia en cuanto a los resultados, la pasión… Eso es lo que hace estos fines de semana tan especiales”.
Alonso es consciente de que hay muchos equipos que han realizado cambios en sus monoplazas, pese a que esta temporada es continuista en comparación con la anterior. Por tanto, el asturiano reconoce que todavía necesitan entender algunas áreas.
“Tenemos resultados distintos dependiendo de la configuración. Tenemos que extraer un poco más de rendimiento del coche y espero que en las próximas carreras tengamos mejoras con las que poder explorar este potencial. La clase media está muy apretada, lo vimos en Baréin y también el año pasado. Tres o cuatro décimas te hacen luchar por ser quinto o sexto, o por ser decimoquinto. Queremos luchar lo más arriba posible”, ha añadido.
Alonso se siente bien, aunque confiesa que Alpine tiene un gran peso sobre los hombros: “A pesar de llevar tantas carreras en Fórmula 1, el hecho de volver es como si fuera mi primera vez en muchos aspectos. No me siento aún cómodo para empujar el todo en el coche. Aquí llego con una mente muy positiva y quiero disfrutar más de lo que lo hice en Baréin, creo que será más divertida”, ha contado.
En otro orden de cosas, a Alonso también le han preguntado por la posibilidad de escribir una biografía. De momento, el asturiano aplaza esa idea a cuando se retire definitivamente del automovilismo, lo que le daría una imagen más global.
“No he trabajado en el libro en dos años y lo hemos pospuesto por algún tiempo. Ahora vuelvo a la Fórmula 1 y lo retomaré cuando diga adiós definitivamente. Prefiero acabar y contar la experiencia de las carreras entera“, ha apuntado para finalizar.
