La Extreme E comienza su andadura en Al-Ula. Ya se ha celebrado el primer shakedown, pero no ha habido suerte para uno de los españoles que participa en la categoría.
Se trata de Carlos Sainz, que tomó la salida de esta pequeña sesión para inspeccionar el trazado, pero su suspensión se rompió a los tres kilómetros. Después, tras varias horas de reparación, Laia Sanz si pudo completar los ocho kilómetros totales. “Difícil día para mí. Hubo problemas en mi stint y tuve que abortar mi intento. Intento estar positivo porque hemos sido rápido al principio, aunque se estoy frustrado y perder mucho tiempo en la pista para la clasificación. Hay que tener la mente abierta aquí, muchas cosas pueden pasar. No estoy muy contento por lo que ha pasado, desde luego”, comentaba el madrileño en una rueda de prensa a la que ha asistido este medio.
A pesar de los problemas, Sainz ya tiene en mente la clasificación de mañana, aunque no todo dependerá de él, al igual que en el resto de coches. “Habrá sorpresas. Intentaré apretar todo lo posible. Depende más de los dos pilotos. Laia ha tenido un buen día, veremos mañana después del primer run e ir mejor en el segundo. Veremos mañana”.
La mencionó brevemente, pero después dijo lo siguiente de la adaptación de Laia a las cuatro ruedas. “Aprende rápido, su experiencia en coches es mínima, pero tiene gran potencia. Tenemos que apoyarla todo lo que podamos”.
Durante la charla, al lado de Sainz estaba Sébastien Loeb, quien viste los colores del X44, conjunto de Lewis Hamilton. Otra competición en la compartirán pista y este dice el dos veces Campeón del Mundo de Rally. “Me siguió en el Rally, Dakar, aquí… Seb es un gran piloto que existe en el Mundo. Tenerle aquí es genial, seguro que lucharemos juntos. Un gran competidor”.
