Charles Leclerc saldrá mañana desde la Pole en el Gran Premio de Mónaco. Sin embargo, el piloto monegasco se ha ido contra el muro en la recta final de la sesión y ha provocado una bandera roja, por lo que sus rivales no han podido mejorar sus cronos.
Ferrari ha ido rápido durante todo el fin de semana y tanto Leclerc como Carlos Sainz eran candidatos para llevarse la pole. El piloto monegasco ha conseguido un 1:11.113 en su primer intento de la Q3 y tenía la pole provisional, pero en su segundo intento ha tocado el muro antes de llegar a la chicane de la piscina, ha saltado por encima de las bananas y ha impactado contra el muro.
“Es una pena terminar contra el muro porque no sientes lo mismo, pero a la vez estoy increíblemente contento con mi vuelta. La primera curva ha sido complicada, no la he hecho bien, pero el segundo y tercer sector lo he hecho perfecto. Estoy contento de conseguir esta pole”, ha expresado en las entrevistas post-clasificación.
La bandera roja que ha protagonizado ha impedido que sus rivales pudieran hacer un último intento para llevarse la pole. Leclerc, a pesar del accidente, está contento con su vuelta y con haber sido capaz de demostrar su ritmo.
“Ha sido muy difícil gestionarme mentalmente después de la segunda tanda, me sentía muy emotivo dentro del coche, pero me he dicho que es la Q3 y tengo que hacerlo todo perfecto. He conseguido hacerlo, estoy increíblemente contento, pero es mañana cuando puntuamos. Tengo que decir que es una gran sorpresa para todos conseguir esa pole y el cuarto lugar”, ha añadido.
En el pasado, Leclerc nunca ha conseguido un buen resultado en su carrera de casa. Por tanto, pide prudencia cuando le preguntan si podrá ganar la carrera: “Siempre he sido muy desafortunado aquí, así que esperemos“. Para cerrar, también se le ha planteado la posibilidad de que reciba una penalización si tiene que cambiar algún elemento como la transición. “Estoy preocupado, pero ya veremos”, ha zanjado.
