No hay mejor escenario que estrenar monoplaza que en Mónaco. Mejor tarde que nunca, ya que Nissan esperaba llevar este nuevo paquete para Roma, pero ha tenido que esperar cuatro rondas más.
Esto les ha hecho dejarse muchos puntos, pero el nuevo tren motriz junto a las actualizaciones en hardware y software han llegado con el objetivo de “mejorar el rendimiento del Gen2”. Cabe destacar que el paquete permanecerá hasta el fin de esta era de monoplazas. “Estamos centrados en extraer el máximo. El nuevo tren motriz es el resultado de una colaboración cada vez más estrecha entre nuestro negocio de automóviles de carretera y nuestro proyecto de Fórmula E”, ha comentado Tommaso Volpe, director de deportes de motor de Nissan.
Oliver Rowland llega a Mónaco con 27 puntos, duodécimo en el Mundial. En la primera carrera de Valencia perdió el podio por usar más potencia de lo permitido, mientras que en la siguiente sumó doce puntos. Sébastien Buemi se fue decepcionado de España, ya que aseguró haber estado “en el momento inadecuado” en ambas carreras.
Buemi y Rowland saben lo que es estar en el podio de Mónaco
Buemi sabe lo que es ganar en Mónaco; en la primera temporada y en la tercera, en ambas acabó segundo del Campeonato a finales de año. Menciona sus victorias, pero centra más su discurso en las nuevas mejoras. “Hay mucho en lo que el equipo debe concentrarse este fin de semana y este es un desafío emocionante”.
El suizo hace referencia de nuevo a sus resultados en Valencia, pero mira ya a Mónaco. “Los resultados no me salieron bien en Valencia, pero sentí que la suerte no estaba de mi lado, ya que tenía el ritmo para entrar en la Super Pole y fuimos rápidos en todas las condiciones de la pista. Espero poder mostrar lo que podemos hacer en las calles de Mónaco”.
Oliver Rolwand no ha ganado en Mónaco, pero sabe lo que es subirse al podio. “Conseguí un podio en Mónaco en 2019 y a cualquier piloto le encantaría ganar aquí. No puedo esperar para ir a competir con nuestro nuevo tren motriz de Fórmula E de Nissan”.
