Carlos Sainz no ha podido luchar por la pole por la bandera roja final que ha protagonizado su compañero de equipo, Charles Leclerc. El piloto español se ha mostrado enfadado, pues afirma que tenía ritmo para llevarse la pole.
Sainz ha ido bien durante todo el fin de semana, ha sido segundo en todas las sesiones de entrenamientos libres y este sábado tenía ritmo para luchar por la pole. Ha sido muy rápido durante la Q1, la Q2 y el primer intento de la Q3. Sin embargo, la bandera roja que ha protagonizado Leclerc cuando ha impactado contra las protecciones ha lastrado cualquier opción de lograrlo.
“No lo ha habido y os podéis imaginar la rabia que tengo. Es la primera oportunidad que tengo de hacer la pole en toda mi carrera y ni siquiera puedo intentarlo“, ha señalado en declaraciones con DAZN F1.
El español opina que tenía un par de décimas en el bolsillo para el último intento de la Q3, al igual que han confesado Max Verstappen y Valtteri Bottas. Tal y como ha confesado, es la primera vez en su carrera deportiva que tenía coche para luchar por la pole y, pese a que saldrá desde la segunda línea y todavía tiene opciones de luchar contra los pilotos de arriba, afirmaba que está “muy cabreado”.
“Tenía ritmo de sobra para hacer 10:1, 10:2, pero no lo he podido hacer. En el primer run de la Q3 tenía mucho tráfico, gente delante y no pude calentar bien los neumáticos. El último sector quizá no ha sido el mejor, pero sabía que tenía dos o tres décimas guardadas en el bolsillo para el último run y no lo he podido sacar“, ha añadido para cerrar.
