Sergio Pérez ha sido el ganador del Gran Premio de Azerbaiyán. El piloto mexicano se ha llevado su primera victoria como piloto de Red Bull y ha ganado en un día en el que ha fallado Lewis Hamilton y se ha accidentado Max Verstappen. Gran día para él, que confirma su romance con este circuito callejero de Bakú.
Pérez ha realizado una gran salida y en menos de siete vueltas ya estaba tercero. Por estrategia le ha ganado la posición a Hamilton, y tras ello, ha hecho todo lo que quiere Red Bull, estar justo detrás de Verstappen.
Una vez que el holandés ha pinchado y ha tenido ese accidente, ha liderado la carrera y tras mantener el liderato en la segunda salida ha ganado la carrera. El mexicano está muy feliz, aunque ha sido una pena el abandono de su compañero de equipo, ya que el doblete hubiera sido muy especial.
“Estoy muy contento hoy. Normalmente Bakú es una locura. Lo siento por Max, se merecía la victoria, el doblete hubiera sido increíble. Estábamos cerca de retirar el coche y hemos conseguido ganar. He tenido un ritmo muy fuerte en toda la carrera”, ha reconocido Pérez.
Pérez explica que Hamilton le ha apretado al máximo desde el momento en el que le ha adelantado por estrategia. Tras el accidente de Verstappen, la segunda salida ha sido un caos, pero él ha aguantado su línea de frenada, mientras que Lewis no lo ha hecho. Triunfo muy especial para él, el cual puede suponer un antes y un después en su etapa Red Bull.
“Lewis me ha apretado en todo momento. En la segunda salida he salido mal y él estaba a mi lado, no podía perder el punto de frenada. Él ha hecho lo mismo pero no ha funcionado. Esta victoria es un subidón de moral tanto para mí como para el equipo”, ha comentado Sergio para cerrar.
Con esta victoria Pérez llega al tercer puesto en el Mundial de Pilotos, su mejor clasificación en este Campeonato en toda su carrera. El mexicano le ha dado 25 puntos más a Red Bull en el Mundial de Constructores y el equipo aventaja ahora en 26 unidades a Mercedes.
