Pirelli predice una estrategia a una parada en el GP de Francia

Plano general de Paul Ricard. Foto: FIA.

La gama media de Pirelli con el C2, C3 y C4 regresa este fin de semana en Francia. La combinación que estuvo presente tanto en Baréin como en Imola vuelve en Paul Ricard, un circuito con gran variedad de curvas. La marca italiana adelanta una estrategia a una parada, pero recuerda que hay diferentes formas de hacerla funcionar.

En 2019, siete de los diez primeros clasificados (incluidos los tres hombres que finalizaron en el podio) hicieron una estrategia a una parada. Arrancaron la prueba con el neumático medio y la acabaron con el duro. Fue un fin de semana en el que hubo mucho miedo de rodar con el blando, dado su excesivo desgaste.

Dos años después, la Fórmula 1 vuelve a Paul Ricard y lo hace con la misma combinación de neumáticos. Los monoplazas han cambiado con respecto a 2019, pero queda la duda si el compuesto blando seguirá dando tantos dolores de cabeza. Clasificar con el neumático medio puede ser muy importante para la carrera, como ya lo fue en las dos últimas ediciones de este evento.

El máximo responsable de Pirelli, Mario Isola, cree que la combinación C2, C3 y C4 es la mejor para este evento. Después de llevar su gama más dura a Portimao y España y la más blanda a Mónaco y Bakú, la intermedia vuelve a hacer acto de presencia. El italiano sostiene que lo más probable es ver estrategias a una parada, aunque asegura que puede haber variedad.

“Hemos vuelto a la combinación de neumáticos que usamos en las dos primeras del año, es decir, a la gama media. Es la combinación más versátil, que está adaptada a diferentes estrategias y también encaja muy bien con Paul Ricard. Es un circuito con diferentes tipos de curvas, y hace dos años, la mayoría de pilotos hicieron una carrera a una parada. Eso sí, hubo diferentes formas de hacer funcionar esa estrategia”, ha declarado Isola.

Pirelli también advierte sobre las altas temperaturas que podría haber en Paul Ricard este fin de semana. Hace dos años, la pista alcanzó hasta los 50 grados de temperatura, por lo que gestionar los neumáticos no será tarea fácil.