Carlos Sainz tuvo un Gran Premio con altibajos. En la clasificación del viernes logró ser séptimo, por delante de su compañero. Durante el sábado, tuvo un accidente en los segundos libres que le mermaron la confianza y desde entonces no ha estado cómodo. En la clasificación al sprint no perdió posición y durante la carrera del domingo ha ganado una.
A pesar de ser regular durante el fin de semana, no se ha encontrado cómodo, le ha faltado ritmo y confianza para poder aspirar a algo más.
Además, sus máximos rivales en el Mundial, McLaren, han logrado sacar un buen puñado de puntos que delega a Ferrari a la cuarta posición de constructores, catorce puntos por debajo de los ingleses.
El español, decepcionado, ha declarado lo siguiente para DAZN F1:
“Hemos salvado el fin de semana, pero ha sido difícil y duro. Durante la carrera no he estado cómodo. Deslizaba mucho la parte trasera y cuando me acercaba a alguien me faltaba ritmo para mantener una lucha cuerpo a cuerpo. Si antes de llegar a Monza nos dicen que acabamos cuarto y sexto, lo hubiéramos firmado sin ninguna duda. Pero llegas aquí, delante de todos los tifosi y con dificultades en el pilotaje y no te sientes contento. Cuando hemos quitado carga aerodinámica ha sido más difícil de controlar, al contrario de lo que pensábamos. Ahora toca ir a Maranello, analizar los datos y aprender de los fallos para estar listos en Sochi.”
El madrileño se mantiene séptimo en el Campeonato de Pilotos, a pesar de que Ricciardo se le acerca por debajo, con una diferencia de 14.5 puntos y su compañero, Charles Leclerc, se aleja por encima con una diferencia de 6.5 puntos. El piloto de Ferrari parece estar costándole la vuelta de las vacaciones. Tiene una semana de descanso por delante para volver a darlo todo en Rusia y mantener el pulso con McLaren en el Mundial.
