El Gran Premio de Rusia está en duda, ya que este país ha decidido invadir Ucrania. La Fórmula 1 debate en estos momentos la cancelación de esa carrera y volver a Turquía. Los pilotos también han querido dar su opinión este jueves en Barcelona.
El más claro de todos ha sido Sebastian Vettel, quien ha dejado claro que no viajará a Sochi en el caso de que el Gran Premio siga adelante. “Me he despertado otra vez después de ver las noticias de la mañana algo impactado. Creo que es terrible ver lo que está pasando, y si miras al calendario, hay una carrera programada en Rusia”, comentaba según recoge Motorsport.com.
“Para mí, mi decisión propia, es que no se debería correr en ese país. Lo siento por la gente, por los inocentes que están perdiendo la vida y que son asesinados por razones estúpidas bajo un liderazgo extraño y loco”, continuaba al respecto insistiendo en que “su decisión estaba tomada”.
El resto de los pilotos no fue tan contundente. Fernando Alonso confía en la Fórmula 1 indicando que “haría lo mejor”, mientras que Charles Leclerc mantenía que la F1 “tomará una elección cuando tenga más información que la que tienen ellos”. Max Verstappen también fue claro diciendo: “Cuando un país está en guerra, lo mejor no es correr allí”.
La Fórmula 1 se reúne para decidir el futuro de Sochi
Aprovechando que Stefano Domenicali se encuentra en Barcelona, los máximos responsables de los equipos de Fórmula 1 se reunirán con el CEO durante la noche del jueves. La carrera tiene lugar el 25 de septiembre en Sochi. El Gran Circo ya aseguró al comenzar el día que estaba “observando de cerca los desarrollos muy fluidos y continuará monitoreando la situación”.
“Creo que en este momento todo lo que podemos hacer es esperar y ver. Creo que desde ahora hasta la carrera de septiembre hay tiempo. Y mi deseo es que de alguna manera todo se detenga muy pronto”, decía Mattia Binotto, máximo responsable de Ferrari para el medio citado anteriormente.
