McLaren no levanta cabeza en Baréin. Los problemas de los test no se han solventado, ni las nuevas piezas han mejorado la situación. Daniel Ricciardo ha quedado fuera en la Q1, mientras que Lando Norris ni siquiera tuvo opciones de entrar a Q3.
Todo ha cambiado desde Barcelona, donde el MCL36 parecía uno de los coches más fuertes de la parrilla. Ninguno de los dos pilotos se ha colado entre los diez primeros y luchar por los puntos en la carrera de mañana estará muy complicado. “Aquí, debo decir que, obviamente estamos sorprendidos. Ha sido un fin de semana difícil para nosotros, y definitivamente llegamos con el pie en la pata trasera, ya que no hicimos las pruebas correctamente la semana pasada, debido a estos problemas con los frenos que se han producido”. sobre nosotros”, comentó James Key, director técnico, según recoge Motorsport.com.
Reconoce que el equipo perdió demasiado tiempo durante los test comprendiendo todos los problemas en los conductos de freno. “Sabíamos que estábamos un poco apretados con las temperaturas de los frenos delanteros, pero aquí, se dispararon a un nivel que no predijimos. Así que eso requirió mucho aprendizaje y tiempo para arreglarlo”.
Las características del circuito de Baréin han dejado al descubierto muchas debilidades del MCL36. “No me voy a quedar aquí y decir, ‘todo es perfecto’ porque seguro que esta pista en particular, hemos resaltado algunas de las debilidades que tenemos. Y es algo general. Lo que necesitamos es más agarre”.
Por otro lado, Lando Norris ha intentado encontrar una explicación a todo lo que está pasando en McLaren. “Simplemente el tipo de pista. Creo que quizás mostramos un poco más de rendimiento que los demás”, le comentaba a Sky Sports. “Barcelona está más inclinada a la velocidad media y alta y aquí está más inclinada a las curvas de menor velocidad. Ahí es donde hemos estado luchando mucho”.
