El porpoising, un enorme quebradero de cabeza para Mercedes

Lewis Hamilton pilota su W13 durante el Gran Premio de Arabia Saudí. (Fuente: Formula 1)

El equipo Mercedes no ha empezado con buen pie la temporada, a pesar de comenzar pisando el podio en Baréin gracias al tercer puesto de Hamilton. La escuadra de Brackley es tercera en cuanto a rendimiento, bastante por debajo de Ferrari y Red Bull.

En el Gran Premio de Arabia Saudí vimos algo insólito. Lewis Hamilton cayó a las primeras de cambio en la sesión de clasificación. El británico no logró el pase a la Q2. En carrera tan sólo pudo llegar a la última posición de la zona de puntos, mientras su compañero corría en tierra de nadie en la quinta plaza.

Tras dominar sin aparentes problemas la Fórmula 1 durante los últimos años, parece que la entrada de la nueva normativa será lo que les frene en su batalla por lo que sería un noveno campeonato de constructores consecutivo. Ferrari se ha erigido como rival a batir, pero Verstappen ya mandó un mensaje en Yeda de que no les pondrá las cosas nada fáciles.

Desde el equipo Mercedes admiten que aún no saben si serán capaces de plantarles cara a estas dos escuderías, dado los continuos problemas que están teniendo en este arranque, especialmente el porpoising. “Eliminar esto probablemente sea la prioridad número uno porque, en última instancia, nos impide hacer funcionar el coche como nos gustaría para obtener un rendimiento óptimo”, comentaba Andrew Shovlin, jefe de ingeniería, a Motorsport.com.

“Lo que no sabemos es que, si pudiéramos hacer desaparecer ese problema por arte de magia, ¿Dónde estaríamos realmente en términos de ritmo del coche? ¿es lo suficientemente rápido o no? Es muy difícil responder a esas pregunta”, señalaba el de Mercedes.

Los vigentes campeones saben que tienen que estudiar a fondo los factores que están causando que el monoplaza pegue tantos botes en las rectas, pero que el proceso puede llevar tiempo. “Fundamentalmente, tenemos que entender mejor el problema”, decía Shovlin. “Tenemos algunas vías que creo que nos están llevando en la buena dirección, pero nos está llevando un poco de tiempo colocar esas piezas en el coche y estamos trabajando muy duro”.

George Russell, con su Mercedes en Jeddah. (Fuente: Formula 1)

“Somos muy conscientes de que hay otros equipos que han conseguido solucionar este problema más rápido que nosotros y ese no es el estándar con el que normalmente trabajamos. Todos los esfuerzos de la fábrica se centran en solucionar este problema, asegurándonos de no descuidar el desarrollo normal del coche, pero hay mucho trabajo que hacer para tratar de salir de esta situación en este momento”.

Los equipos que han conseguido solucionar parte de este problema lo han hecho sacrificando una parte de la carga aerodinámica, aunque Mercedes, por ahora, seguirá manteniendo el diseño actual del W13. “Si se puede resolver el problema del rebote no es necesario renunciar a la carga aerodinámica. La cuestión es que la mayoría de los equipos, creo que en mayor o menor medida, están cambiando una cosa por la otra. Consideramos que lo que hemos hecho es un parche para el problema y tenemos que arreglar el problema de una manera más eficaz que no sólo disminuya el rendimiento”, añadía.

En estos días que no ha habido compromisos, en Mercedes se han enfocado en gran parte en tratar de resolver de alguna manera este quebradero de cabeza, aunque dan por hecho que los resultados no serán inmediatos. “Tenemos algunas vías que están empezando a mostrar resultados interesantes, las hemos explorado en la pista y hemos dado un paso en la dirección correcta, pero claramente no es lo suficientemente grande”, afirmaba Shovlin.

“Creo que es un problema que deberíamos resolver en un futuro relativamente cercano, espero. No estamos dando vueltas en la oscuridad, pero tenemos que avanzar rápidamente”, concluía el ingeniero inglés. La Fórmula 1 regresa a Melbourne tras la última visita en 2019, y Mercedes, y sobre todo Hamilton, buscarán resarcirse del palo de Arabia Saudí.