Alfa Romeo acusa a otros equipos de jugar encubierto con la FIA en busca de un cambio en el reglamento que no beneficia a todos.
La nueva normativa trajo consigo un peso mínimo de 795 kilogramos que aumentó a los 798 tras las quejas de algunos equipos. Un problema que los diseñadores de todos los equipos de la parrilla tuvieron que lidiar y Alfa Romeo fue el que mejor los solventó, ya que son los únicos que se acercan a ese mínimo.
Tanto fue así, que los de Hinwil tuvieron problemas en el suelo de su coche al ser demasiado liviano y flexible. Consiguieron fortalecer esta zona, encontrando la combinación perfecta entre el peso y la estabilidad del chasis. Hay rumores en el paddock de que algunos equipos continúan presionando a la FIA para aumentar el peso mínimo.
“Sinceramente, no entiendo todo este alboroto. Me parece que cuando creas un coche de F1 completamente nuevo, el peso es, por norma general, el objetivo más importante al inicio. No puedes acordarte de esto en el último minuto”, comentaba Frédéric Vasseur a una pregunta de Motorsport.com.
“Y me parece que algunos equipos han hecho juegos encubiertos con la FIA, con la esperanza de que elevaran la barra de peso mínimo. A medida que nosotros íbamos trabajando en el actual proyecto, tomamos varias decisiones fundamentales, decisiones difíciles relacionadas, entre otras cosas, al peso. Pero todos saben que esto es lo que es la F1: aquí todos intentan jugar su propio juego”, continuaba al respecto.
Como bien dice Vasseur, si ellos han sido capaces de hacer frente a este problema, otros también podrían. “Personalmente, para mí está bastante claro que el problema de las masas era absolutamente solucionable. Todos podrían haberlo evitado. En este momento, algunos equipos no pueden alcanzar el objetivo mínimo, pero eso es solo porque eligieron otras opciones para ganar más rendimiento sacrificando el peso”.
