Ferrari quiere dar un paso más en Miami para estar por delante de Red Bull. Se montará un nuevo motor a Charles Leclerc, aunque no por problemas de fiabilidad.
La Scuderia, para contrarrestar la diferencia de velocidad con el RB18 en este trazado con zonas muy rápidas, llevará actualizaciones. En primer lugar, un alerón trasero de baja-media carga, mientras que en los entrenamientos libres se volverá a probar el tren delantero que ya usó Carlos Sainz durante los test de Pirelli en Imola.
Leclerc montará el segundo motor, el mismo que tiene ahora Sainz, quien se vio obligado a montarlo en Imola tras un aviso en las comprobaciones que se realizaron, aunque se podrá seguir usando esta pieza en los libres de Miami. La fiabilidad no es algo que preocupe a los italianos, ya que se ha probado en repetidas ocasiones que pueden forzar el turbo con mapas de motor más potentes.
La nueva actualización introduce una modificación en el sistema híbrido, y es que el nuevo MGU-K debería debutar en Miami. Mientras, la ECU y la batería llegarán antes del plazo de homologación máximo de la FIA en el mes de septiembre.
Estos pequeños retoques llegan antes de la gran actualización que se verá en Barcelona y en la que los altos cargos confían. Pase lo que pase, esto será una larga lucha por el Mundial hasta Abu Dabi en la ya conocida “guerra de desarrollo”.