Kamui Kobayashi, piloto de Toyota, ha analizado la derrota de su equipo en Monza en la prueba celebrada el pasado fin de semana. El piloto japonés comparte el Toyota #7 con José María López y Mike Conway y en Italia no tuvieron su mejor día.
En la recta principal tuvieron un toque con el coche ganador, el Alpine, que dañó el coche. Como resultado de dicho incidente, fueron relegados a una decepcionante tercera posición. Por otro lado, el Alpine no sufrió daños y siguió con su carrera de manera correcta, alzándose con la victoria. Por lo tanto, la escudería francesa es aún más líder del WEC de la mano de Mathieu Vaxivierre, Nicolas Lapierre y André Negrao.
Kobayashi era quien conducía cuando el incidente en cuestión sucedió. El piloto japonés estaba en plena batalla por el liderato cuando ambos monoplazas chocaron llanta con llanta. Por mala suerte para los intereses de Toyota, el neumático trasero derecho se desinfló en el acto. A pesar de ello, logró llevar el coche a boxes, aunque se perdió mucho tiempo en las correspondientes reparaciones y los 90 segundos de sanción.
Sin embargo, Kobayashi ha reconocido que, a lo mejor que podía optar Toyota en dicha prueba, es un podio. “Hicimos todo lo posible para obtener la victoria, pero no fue suficiente y perdimos la oportunidad. Tener dos coches en el podio era lo mejor que podíamos conseguir”, comenzaba diciendo tras la carrera.
El japonés explicó como se sintió dentro del LMH durante sus relevos. “En mi turno, luché un poco en términos de ritmo. Traté de mantener nuestra posición y tomamos la decisión de no cambiar neumáticos en la parada en boxes, pero perdí mucho tiempo. Luego tuve un contacto con el Alpine, que nos hizo perder mucho tiempo y tuvimos la sanción. Al final del día, no creo que realmente el contacto haya cambiado nuestra posición final. No fuimos lo suficientemente buenos“, comentó el japonés.
