Mercedes comenzó la temporada con muchos problemas, sobre todo relacionados con el porpoising. Salieron perjudicados en muchas carreras, pero ahora parecen asomar la cabeza.
El W13 es uno de los conceptos más arriesgados de la parrilla. Destacan los estrechos pontones, que asombraron a muchos. Los alemanes se mantuvieron fieles a su estilo y ahora, Andrew Shovlin, explica porqué nunca cambiaron su filosofía, evitando, de esta manera, copiar a equipos como Red Bull y Ferrari.
Trabajar en este concepto los ha llevado hasta la Pole con George Russell en Hungría y han subido al podio en las últimas seis carreras. “Cuando miras el futuro a largo plazo como equipo a través del reglamento, copiar un diseño sólo te ayudará hasta cierto punto. Los elementos más delicados de la aerodinámica del coche están debajo de él. Así que la parte que menos se puede copiar es la más importante”, comentaba el director de ingeniería para Motorspot.com.
Shovlin quiso dejar claro que Mercedes no hubiera acabado con todos sus problemas de cambiar el concepto. Tampoco ve factible el hecho de copiar a otros. “Tenemos que ser muy cuidadosos con lo que hacemos con nuestros recursos y lo que no queríamos era empezar un proyecto que podía tardar entre cuatro y seis semanas en completarse”.
Hablando de la temporada que viene, los ocho veces Campeones del Mundo no descartan cambiar de concepto y acercarse más a Red Bull. El director del equipo, Toto Wolff, dijo que no tienen “ninguna preferencia específica” sobre el concepto a seguir, sino que simplemente intentarán “tener el coche más rápido”.
“Nunca copiaremos a nadie, pero podemos ver cosas en otros coches que consideramos que nos pueden ayudar. Así que estas preguntas se están discutiendo en este momento y serán respondidas más o menos en el mes de septiembre”, concluyó el jefe de equipo.
