El Gran Premio que ha firmado George Russell en Melbourne es simplemente espectacular. La pena es que un fallo en el motor le obligara a retirarse cuando venía en plena remontada.
Russell ha estado por delante de su compañero en todas las sesiones, también en clasificación. La gran salida le permitió colocarse líder de la carrera por delante de Max Verstappen. Aguantó al frente hasta el segundo coche de seguridad provocado por Alex Albon, que acabó en bandera roja.
El joven británico entró a cambiar neumáticos, pero esa neutralización jugó en su contra, relegado a la séptima posición. “Lo hemos hecho todo bien este fin de semana. Tuvimos una gran calificación, la salida ha sido perfecta. Hemos gestionado bien el primer stint y podría haberlo alargado mucho más”, decía Russell para la web de su equipo.
“No veo ninguna razón por la que no podríamos haber luchado por la victoria, así que es decepcionante”, comentaba Russell. Sobre el fallo en el motor que provocó el abandono, dice: “En cuanto pasé por la curva 10, sentí que algo se iba. Tres curvas después, estaba parado. Cuando no es tu día, no es tu día”.
En Mercedes hay “mucho trabajo que hacer para alcanzar a Red Bull, pero podemos sacar lo positivo de este fin de semana”, concluía el piloto de Mercedes que ya mira a Bakú con ilusión y orgulloso de su equipo.
Toto Wolff dijo que “eran buenas noticias” que el W14 haya estado a la altura de Ferrari y Aston Martin durante el Gran Premio, incluso por delante. “Son buenas noticias para nosotros, y creo que hemos dado un paso adelante este fin de semana, tanto a una vuelta como en ritmo de carrera”, admitía el jefe del equipo alemán.
Durante la bandera roja, Wolff charló largo y tendido con Russell, ya que había perdido varias posiciones. El austriaco defiende la estrategia. “Ha sido desafortunado con George. Ha hecho una gran parada desde la primera posición y ha cambiado al neumático duro. Fue una decisión totalmente acertada, y habría estado muy delante. Con la bandera roja, su carrera ya no fue tan buena”.
