La IndyCar celebró el Carb Day este viernes y Takuma Sato fue el más rápido. De aquí, a la gran carrera de las 500 Millas de Indianápolis que se disputa este domingo a partir de las 18:30.
El dos veces Campeón de las 500 millas, Sato, consiguió una velocidad media de 227.855 mph, bajo el tráfico. Saldrá desde la octava posición. “Estoy teniendo una sensación agradable, que es exactamente lo que realmente quería. Mis muchachos hicieron un trabajo fantástico toda la semana. La organización lo hizo fantástico, así que estoy feliz”, comentaba el japonés.
En tan solo dos horas, que no son pocas, los pilotos dieron un total de 2.355 vueltas al óvalo de Indianápolis, sin incidentes. Scott Dixon fue segunda con una media d e227.285 mph. El de Chip Ganassi no se sintió cómodo del todo. “Para ser honesto, no empezó muy bien. El coche estaba fuera de balance. Tuvimos que trabajar un poco en eso. Algunos competidores son fuertes por ahí. Nuevamente, sigo pensando que tenemos más que encontrar”.
Pero no hay tiempo para más porque la siguiente sesión es la gran carrera de la IndyCar. En la tercera posición terminó Will Power, que saldrá desde la decimosegunda posición y tiene la mirada puesta en la victoria, tal y como hizo en 2018. En cuarta posición terminó Alex Palou, el ganador de la Pole la semana pasada.
Palou puso sobre la mesa una situación que podría pasar en carrera. En las diferentes simulaciones a lo largo de la sesión, el catalán habló de la estrategia que tomó Rinus VeeKay. El de Ed Carpenter Racing no quiso liderar el pelotón para ensayar el ahorro de combustible. Palou solo espera que en carrera “no se vuelvan locos con el que va el primero” y ya empieza a sacar sus conclusiones.