Kyle Kirkwood recuerda su accidente en Indianápolis: “El choque superó los 80G”

Kyle Kirkwood sufrió un aparatoso accidente en el óvalo de Indianápolis | Getty Images

Las pasadas 500 Millas de Indianápolis celebradas el pasado domingo no trajeron la mejor de las suertes a Kyle Kirkwood. El piloto norteamericano sufrió un fuerte choque al tocar el muro y volcar, provocando que su monoplaza quedase bocabajo y completamente inutilizable.

Después de la prueba, el piloto quiso agradecer al equipo de seguridad del circuito, y a todo el equipo médico de la IndyCar, por haber sabido como reaccionar ante tal accidente y haber logrado que saliese del coche sin demasiadas complicaciones. “El primer impacto contra el muro llegó a alcanzar los 80G. Es algo espeluznante, ya que parece como si estuvieras volando dentro del monoplaza. Mi rodilla golpeo la columna de dirección y me hice algo de daño, pero afortunadamente puedo caminar bien y ahora mismo me encuentro genial”.

Quiero agradecer a IndyCar Medical. Llevan 20 años haciendo las cosas bien y es un privilegio tenerlos en las carreras. Felicitaciones, sois increíbles”, quiso tener en consideración Kirkwood, tal y como recoge Motorsport.com. También le pidieron que describiera el accidente. “Vi a Félix Rosenqvist chocar con la pared, pero al contrario de lo que suele ser normal, el coche rebotó y se fue hacia abajo, por lo que me pilló completamente desprevenido y no pude esquivarle. Fue algo súper desafortunado”.

Kirkwood estaba en entre los favoritos a la victoria tras salir en decimoquinta posición e ir remontando posiciones hasta alcanzar la segunda plaza. A pesar de ello, tuvo una parada lenta y posteriormente cayó hasta el sexto puesto, pero al estar en el grupo de cabeza tenía muchas papeletas para ganar una de las carreras más prestigiosas del automovilismo. Fue justo en ese momento cuando tuvo el accidente.

Colton Herta, su compañero de equipo, también se sintió con las mismas posibilidades. “Avance posiciones hasta llegar a la quinta posición, pero mi choque con Grosjean lo arruinó todo. Desde aquí quiero pedirle perdón. Duele haber quedado noveno, porque había ritmo para mucho más”.