El equipo Nissan pudo inaugurar la temporada 2025 de Fórmula E con un triunfo dominante de Oliver Rowland, pero una sanción impuesta a los equipos con unidad de potencia de la marca japonesa arruinó toda esperanza. Finalmente, fue Mitch Evans quien culminó una gran remontada desde la última posición para llevarse el triunfo.
Rowland hizo una gran carrera desde la salida, en la que ganó la primera posición a Pascal Wehrlein, que tampoco opuso mucha resistencia. En ocasiones, consiguió distanciarse de sus rivales y realizó una gestión más eficiente de la energía del monoplaza, así como de los usos del modo de ataque. Pero, un problema con el control de sistemas le permitió tener más potencia en la primera relanzada de la carrera, lo que llevó consigo una penalización.
Esta situación no fue exclusiva del británico y es algo que se reprodujo también en los otros tres monoplazas motorizados por la marca japonesa. Es decir, tanto su compañero Norman Nato como Sam Bird y Taylor Barnard, los dos pilotos de McLaren. Los cuatro fueron sancionado con un ‘drive through’, con la diferencia del momento en el que se produjo esta sanción.
Mientras que ambos pilotos de McLaren y Nato recibieron, y cumplieron, con su penalización antes de la primera bandera roja, Rowland lo tuvo que hacer posterior a esta neutralización de la carrera, lo que le hizo perder muchas posiciones y caer fuera de la zona de puntos. Terminó la carrera en decimocuarto lugar, justo detrás de su compañero. Por parte del equipo inglés, Barnard ganó la partida a Bird para lograr un podio histórico en su debut en la categoría.
Tras la carrera, y según recoge The Race, Tomasso Volpe, director de equipo de Nissan, declaró lo siguiente. «Por alguna razón, no detectamos este problema específico en todas las pruebas que hemos realizado hasta ahora. Lo solucionaremos. Ahora la frustración es muy difícil de digerir». Un fin de semana decepcionante para Nissan que, pese a todo, sacan la parte positiva. «Para ser honestos, estamos muy contentos de ver en la pista lo que suponíamos que habríamos logrado en términos de mejora», agregó Volpe.
Pero la penalización no fue lo único que arruinó la carrera de Rowland. El primer periodo de bandera roja por la detención de Jake Dennis coincidió con la segunda vez que activaba el modo de ataque, el cual se vio desperdiciado. «Estaba en la posición perfecta para alejarme y casi terminar la carrera con el segundo modo de ataque, y luego llegó la bandera roja, así que perdí esa ventaja de tener los cuatro minutos que me quedaban«, declaró. Con este resultado, y habiendo sumado cero puntos, Nissan ocupa ahora la penúltima posición del Mundial. El equipo japonés tendrá una oportunidad para resarcirse el próximo 11 de enero con la disputa del ePrix de Ciudad de México.