El Campeonato de Resistencia da su pistoletazo de salida el 4 de abril en Portugal. La situación por la COVID-19 sigue siendo crítica, por lo que ya se han tomado las primeras medidas.
Un comunicado lanzado por el WEC confirma que no habrá público ni en Portimao, ni tampoco en Spa, que es la cita siguiente del Mundial. “Siguiendo la guía de las autoridades de salud pública y seguridad y dada la incertidumbre que rodea a la pandemia de COVID-19 en curso, el WEC y los organizadores locales en los dos países han decidido que ambos eventos se llevarán a cabo sin espectadores”, se leía en dicho comunicado.
Frédéric Lequien, nuevo CEO del WEC ha comentado lo siguiente. “Dadas las limitaciones actuales de COVID-19 y siguiendo los consejos locales tanto en Portugal como en Bélgica, hemos decidido celebrar nuestras dos primeras carreras de la temporada a puerta cerrada. Desafortunadamente, existen demasiadas preocupaciones sobre la salud y la seguridad públicas.
De momento Lequien no dice si en el futuro habrá aficionados en la grada, por el momento espera que todas sus ofertas de retransmisión funcionen correctamente. “Nos gustaría agradecer a todos por su apoyo inquebrantable y nos esforzaremos por llevar la acción de los autos deportivos a los hogares de nuestros fanáticos a través de nuestras diversas ofertas de transmisión, la aplicación oficial de la FIA WEC y a través de nuestros canales de redes sociales”.
El WEC ya ha hecho oficial la primera lista de confirmados para esas 8 Horas de Portimao. Tan solo habrá tres hypercar tras la baja de Glickenhaus y la llegada de Corvette Racing a la categoría GTE Pro tras su última participación en 2020 en la cita de Austin. El objetivo de los americanos es volver a las 24 Horas de Le Mans que se perdieron el pasado año debido a la COVID-19.
