Los promotores del Gran Premio sopesan, además, la posibilidad de realizar cambios en el histórico trazado semiurbano de Melbourne.
El Gran Premio de Australia es uno de los más especiales del calendario de Fórmula 1, abriendo habitualmente la temporada.
En las últimas temporadas los aficionados y pilotos han criticado la falta de adelantamientos y los exagerados baches que existen a lo largo del trazado semiurbano de Albert Park.
Es por ello por lo que los promotores se están planteando realizar algunos ajustes en el circuito para ofrecer un mayor espectáculo durante las carreras que allí se disputan.
Andrew Westacott, CEO de la asociación del GP de Australia ha explicado las razones que podrían llevar al circuito a una serie de reformas.
“Es muy probable que haya que reasfaltar el circuito. Tendremos que analizar los elementos y lo que necesita la F1 idealmente para ver si hay algunos ajustes que se puedan hacer para mejorar las carreras”, ha admitido Westacott en declaraciones para Speedcafe.com.
“Vamos a tener conversaciones con gente como Mark Webber, Charlie Whiting y Ross Brawn para tener consideraciones diferentes durante el proceso. Ahora mismo no estoy seguro de lo que haremos. Es lógico que haya cambios en el circuito si hay cambios en las regulaciones técnicas de los coches”, continuaba.
“Los pilotos estuvieron absolutamente contentos con el asfalto la temporada pasada y nos pidieron que no lo tocásemos, aunque si por razones de seguridad o mejoría hay requerimientos para cambiarlo, trabajaremos junto a la FIA y la F1″.
Ante todo, Westacott aclara que los cambios que se vayan a realizar no supondrán una revolución.
“La geometría de nuestro circuito bordea un lago y hay ciertos puntos fijos como edificios. Los cambios, si hacen falta, seguramente serán menores. No hay duda de que intentaremos que haya más adelantamientos”, finalizaba el australiano.
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