La FIA afirma que el haló salvó a Leclerc de un golpe en la visera en Spa

El accidente en la salida del Gran Premio de Bélgica en el circuito de Spa fue uno de los más duros y peligrosos de toda la temporada. Un error de Nico Hülkenberg, que frenó muy tarde, hizo que Fernando Alonso volase por los aires y que impactase con la parte baja de su coche sobre el halo del Sauber de Charles Leclerc. Los tres pilotos acabaron abandonando en la primera curva y Hülkenberg fue sancionado con diez posiciones para la siguiente carrera por ser el culpable del accidente.

El halo, introducido esta temporada en la Fórmula uno, fue muy criticado en su día ya que quitaba visibilidad a los pilotos. Sin embargo, ha servido para proteger a los pilotos en caso de que estos sufran un accidente. Ha quedado claro que el halo ha aumentado la seguridad de los pilotos.

En el Gran Premio de Bélgica, Alonso golpeó con uno de sus neumáticos el halo de Charles Leclerc. Sin el halo el piloto monegasco podría tener una lesión grave en la cabeza o en el cuello. El halo soportó la mitad de fuerza que está preparado para soportar.

El director de seguridad de la FIA, Adam Baker, ha hecho declaraciones sobre este asunto: “Creemos que el alerón delantero de Alonso habría entrado en contacto con la visera de Leclerc. Es difícil de predecir la gravedad de ese contacto con precisión”.

Las conclusiones de la investigación ha sido estas:

1. La fuerza que soportó el halo fue de 58 newtons, casi la mitad de la fuerza que puede soportar este dispositivo.
2. Si el neumático hubiera tocado el casco de Leclerc con una fuerza similar, hubiera derivado en una lesión grave en la cabeza o cuello del piloto.
3. La investigación de Sauber confirma que los anclajes del halo y el chasis no se dañaron ni deformaron por el contacto con el neumático de Alonso.
4. Si toda la masa del coche de Alonso hubiese impactado con el halo de Leclerc, la energía del impacto habría tenido consecuencias devastadoras si ésta se hubiera descargado directamente en Leclerc. En ese caso, el halo no habría podido absorber toda esta energía sin deformarse, ni fallar.