Porsche ha confirmado que continuarán en la categoría GTE-Pro del WEC hasta finales de 2022, garantizando así su continuidad hasta 2023, año en el que pasarán a competir en la categoría LMDh.
A finales de 2020, Porsche confirmó su compromiso con el Mundial de Resistencia y anunció que competirán con un LMDh a partir de 2023. Con este movimiento también buscarán competir en la IMSA, pues ellos mismos confirmaron que querían luchar con un propulsor híbrido en grandes carreras como Le Mans, Daytona o Sebring.
Sin embargo, no había noticias de los planes del equipo para 2022. Ahora confirman que seguirán en la categoría GTE-Pro gracias al reciente desarrollo que han hecho del Porsche 911 RSR, según publica el portal Motorsport-Total. Esto garantiza que la categoría no desaparezca de cara a 2022.
Con la caída de Aston Martin, tan solo Porsche y Ferrari correrán en GTE-Pro este 2021. De cara a 2022, Porsche es la única marca que ha confirmado su presencia, aunque Ferrari podría seguir también sus pasos. Sin embargo, los cuatro coches tendrán un rival más en la primera cita de la temporada 2021, pues Corvette ha confirmado su participación en las 6 Horas de Spa.
Antonio García y Oliver Gavin se subirán a un Corvette C8.R GTE en Bélgica, el anticipo a las 24 Horas de Le Mans. Sin embargo, todavía se desconoce si el equipo disputará más carreras en 2022.
“Se están debatiendo los posible usos futuros del Corvette C8.R. Las regulaciones actuales de GTE permiten que el Corvette C8.R compita con otros fabricantes en el WEC“, afirman en un comunicado de General Motors.
Los planes de Corvette más allá de 2021 no están claro y por el momento también se desconoce si correrán en la nueva clase GTD Pro en el IMSA SportsCar Championship. En el mismo comunicado General Motors, se abre esta posibilidad junto a Chevrolet.
“Además de las carreras europeas de la temporada 2021, Chevrolet y Corvette Racing esperan más salidas en los próximos años en Le Mans y en carreras seleccionadas del WEC“, finaliza el comunicado.
