Hay diferentes propuestas para 2022, pero los equipos han rechazado ya algunas. En primer lugar, Ross Brawn habló sobre la posibilidad de explicar cada viernes la configuración con la que se afrontará el fin de semana para explicar novedades técnicas. Otra fue la relacionada con el Parc Fermé.
El director deportivo de la Fórmula 1 puso sobre la mesa que los equipos tendrían que poner los monoplazas a disposición de los medios de comunicación el viernes por la mañana, antes de los entrenamientos libres, para que los equipos explicaran las novedades técnicas introducidas para el fin de semana de careras.
La idea era hacer más compresibles, de cara al público, las nuevas soluciones técnicas, tratando de eludir el maniático secretismo de los equipos, que siempre tratan de mantener lo máximo posible sus mayores secretos. Esta sesión se iba a llamar show and tell, pero ha desaparecido por completo y los equipos podría emitir un comunicado en el que insinúan cuales son las nuevas piezas que se montarán en los coches para salir a pista.
Los equipos también se enfrentaron a una idea sobre el Parc Fermé, que según publica Auto Motor Und Sport, estos se han negado rotundamente. Se comentó que este comenzara antes de los que coches entraran a la pista. Como hasta ahora, los ingenieros podrán modificar sus monoplazas hasta el inicio de la clasificación.
El Parc Fermé se introdujo en 2003 con el objetivo de reducir los costes y limitar la preparación de los coches diseñados específicamente para la clasificación. Aunque ese concepto podría compartirse, la apertura del Parc Fermé en general habría hecho que las simulaciones fueran un factor decisivo, restando valor a los entrenamientos libres. Aunque estas dos se hayan ya descartado, hay otras ideas encima de la mesa, como la intención de invertir la parrilla el sábado.
