Los periodos de bandera amarilla y la estrategia de Andretti Autosport dieron una oportunidad a Romain Grosjean en el GP de Long Beach. Terminó segundo, rozando su primera victoria en IndyCar, algo que ya sucedió en Indianápolis en 2021.
Después de una gran temporada de debut en Dale Coyne, el francés recibió una oferta de Michael Andretti, también compitiendo en óvalos, que no pudo rechazar. El pasado GP de Long Beach sumó su primer podio con el equipo tras salir sexto.
“Este año definitivamente sé que tengo que conducir un poco diferente. Estoy tratando de ir por el campeonato, y no puedo ir a toda máquina todo el tiempo. Como en St. Pete en la carrera, estaba luchando un poco con mi parte delantera, así que lo tomé con cuidado”, comentaba Grosjean tras acabar la carrera en Long Beach.
Grosjean volvió a disfrutar de las carreras en 2021, luchando por cosas importantes en algunas ocasiones. Cree que aún puede hacerlo mejor. “Todavía creo que hay un par de cosas que podemos hacer mejor, pero sí, creo que el año pasado tuve mala suerte a veces. Estaba en camino de una muy buena en Nashville, solo la cantidad de banderas amarillas que habíamos matado”.
Con el del fin de semana pasado, Grosjean suma cuatro podios en IndyCar en apenas 16 carreras. Este 2022 ocupa a el sexto puesto en el Mundial con un total de 75 puntos. De hecho, es el primer piloto de Andretti clasificado en la tabla. Por delante tiene a tres Penske y dos Chip Ganassi.
