Fréderic Vasseur, nuevo jefe de la Scuderia Ferrari, ha comenzado su era con dos objetivos claros: no tener piloto favorito y ganar el campeonato.
El objetivo es ganar el campeonato, y si quieres ganarlo, tienes que batir a Red Bull. “Es un objetivo obvio cuando estás en un equipo ‘top’. No puedes tener otro objetivo que no sea la victoria. Si te conformas con la segunda posición, es por falta de ambición. Lo tenemos todo para hacer un buen trabajo y el objetivo tiene que ser ganar, por supuesto”, comentaba en su primera rueda de prensa como jefe del equipo italiano.
Acto seguido, el nuevo director de Ferrari habló sobre los posibles favoritismos con los pilotos. A pesar de haber coincidido con Charles Leclerc anteriormente, Vasseur confirma que no habrá “piloto número uno” hasta que haya mucha diferencia entre uno y otro.
“Tenemos dos buenos pilotos y tenemos la capacidad de darles exactamente el mismo coche, la misma estructura y el mismo apoyo. Lo que está claro es que el objetivo es ganar para Ferrari, así que no habrá un número uno y un número dos, pero si en un momento dado tenemos que tomar medidas, las tomaremos, sin importar si es hacia un lado o el otro“, ha dicho.
Además, Vasseur ha confirmado que tanto en su época en Renault como en Sauber estuvo interesado en Carlos Sainz. “Sobre Carlos, ya sabéis que yo mantuve conversaciones con él y con su entorno para traerle a Renault y más tarde fichó por el equipo. Cuando estaba en Sauber, intenté fichar a Carlos otra vez, aunque esta vez sin éxito. Entonces pensé que la mejor manera de estar con Carlos era fichar por el equipo en el que él esté”.
“Siempre hemos tenido una muy buena relación, confío en él y creo que ha demostrado en los últimos dos años que es un potencial ganador y es muy importante para el equipo. No tendremos un número uno y un número dos, eso está claro, pero si en algún momento tenemos que tomar medidas, sea para Carlos o para Charles, lo haremos”, añadía sobre el piloto madrileño.
Vasseur también habló sobre la posibilidad de reestructurar gran parte del equipo. “Sería arrogante por mi parte cambiar la organización técnica después de sólo dos semanas en el equipo. Estamos en conversaciones para ver cómo podemos mejorar el sistema, cuál es el punto débil y cómo podemos hacer un mejor trabajo. Confío en los chicos e intentaremos darles las mejores condiciones para hacer su trabajo. Después de un par de meses, si no está funcionando, hay que tomar medidas, pero confío en ellos”.
