El piloto australiano de Virtuosi, tras no puntuar en Baréin y conseguir solo 18 puntos en Yeda, no se siente cómodo con el monoplaza de este año.
Tras acabar sexto en su temporada de debut en la Fórmula 2, Jack Doohan no ha empezado de la mejor de las maneras en su segundo año en la antesala de la Fórmula 1. En Baréin ni siquiera pudo puntuar, mientras que en Yeda la cosa mejoró, consiguiendo dos puntos en la carrera sprint y quedar segundo en la carrera principal. A pesar de eso, Doohan no se siente cómodo este año y siente que en realidad su temporada ha comenzado en Arabia Saudita.
“El objetivo era obtener algunos puntos sólidos. Los mejores pilotos del campeonato no consiguieron buenos resultados. Ser regular es fundamental para subir en la clasificación y tratar de consolidarme para esta temporada. He estado luchando para encontrar confianza. Tuvimos bastantes problemas fundamentales en lo que va de la temporada, lo que ha sido un gran impacto porque no ha estado bajo nuestro control. Hicimos una buena carrera en Yeda. No creo que tuviera ritmo pero, finalmente tuvimos un poco de buena suerte, estoy feliz de estar aquí”, dijo Doohan para Motorsport.com.
El piloto de la academia de Alpine no quiso profundizar más en los problemas de su monoplaza. Lo que sí dijo es que, desde Virtuosi se están “eliminando procesos paso a paso, tratando de desentrañar las cosas”. A pesar de todo, Doohan afirmó que se sintió “bastante más confiado” con el monoplaza que en Baréin, lo cual es positivo. La Fórmula 2 es un campeonato de 14 carreras y es crucial anotar buenos puntos desde el principio para poder aspirar al título.
Otra de las claves es que este es el segundo año del piloto de la academia Alpine en la categoría, siendo crucial que este año obtenga buenos resultados si quiere mirar a un posible futuro a corto plazo en la Fórmula 1. Tras el turbulento inicio en Shakir y la pequeña mejoría de sensaciones en Yeda, Doohan se sigue viendo como aspirante al título, una vez que solventen los problemas. “Todavía no tengo la misma sensación que tuve a fines del año pasado. Pero creo que eso es solo positivo. Se siente agridulce, no estoy feliz y el equipo no está contento de que estemos en esta posición. Creo que cuando arreglemos las cosas, seremos muy difíciles de vencer”, finalizó el australiano.
