Las carreras ovales han disminuido en el calendario de la IndyCar. Scott Dixon pide a la organización que se introduzcan más carreras de estas características.
Este fin de semana, la categoría americana está en Texas para la segunda cita de la temporada, pero en esta ocasión no habrá cita doble como ha sucedido en los últimos años. La IndyCar visitará tres ovales más este año, IMS en el mes de mayo, Iowa con dos carreras en julio y, por último, Gateway en el mes de agosto.
Una de las principales razones por las que se han reducido las carreras ovales es que no hay tanta presencia de fanáticos en las gradas. Dixon ha visitado este trazado desde 20023, un total de 24 carreras, donde ha conseguido cinco victorias. “Me encantaría ver más óvalos en el calendario, ya sea un Richmond o un Kentucky o algunos de los circuitos que nos brindaron carreras fantásticas a lo largo de los años. Me gustaría pensar que este sería nuestro mínimo de carreras en óvalo, seguro”, comentaba ante la prensa en Texas, según recoge RaceFans.net.
Las carreras en Texas han ido cambiando a lo largo de la historia. En algunos años, los pilotos tan solo se podían seguir unos a otros sin materializar adelantamientos. Este óvalo también dio la bienvenida a carreras nocturnas, pero volvieron a disputarse por el día. Ese es uno de varios factores que han afectado la popularidad y la calidad de las carreras.
Para mejorar el espectáculo, la temporada pasada se les permitió a los equipos correr con un kit aerodinámico diferente, que genera más carga. La carrera tuvo doce líderes. “Creo que este año la serie IndyCar ha hecho un buen trabajo al traer algunas piezas aerodinámicas actualizadas, que creo que definitivamente apretarán la parrilla”.
Usar la línea alta del peralte en Texas también penalizada, ya que hay una especie de resina sintética para ayudar a los coches de la NASCAR. Este año también se celebra una sesión extra para correr por esa línea y dejar algo de goma.
