Kubica desvela que Williams pierde cada vez más empleados

Robert Kubica volverá a la Fórmula 1 tras 8 años sin disputar un Gran Premio. No lo hace desde aquel grave accidente de 2011 en el Rallye de Andorra.

Aunque esto es un sueño para el piloto, no va a ser precisamente un camino de rosas. El polaco volverá a la Fórmula 1 con el peor equipo de la parrilla esta temporada y no hay expectativas positivas para su desarrollo. Kubica declaró que no es el mejor momento para su regreso pues mucha gente del equipo se está marchando y por la situación de la escudería, les es difícil encontrar buenos empleados; la mayor parte de la gente busca trabajar en los mejores equipos.

Lógicamente, todo esto influirá en el rendimiento del monoplaza de 2019 pero Robert Kubica dice que no se preocupará demasiado por el coche que, hasta a finales de febrero, no pisará asfalto. El piloto ha comentado que en 2008 su coche (BMW) llegaba a perder hasta 4 segundos en los test pero en dos meses cambió la situación aunque, lamentablemente, ahora están en una situación diferente.

Aun contando con las experiencias del pasado, el polaco no espera milagros ni una mejora del monoplaza inmediata. Sí es verdad que en su antiguo equipo mejoró la situación pero fue gracias a los grandes recursos del equipo (BMW 2008) y la capacidad de realizar innumerables test. Por el contrario, Williams no cuenta con grandes recursos actualmente y la normativa ya no permite la realización de tantas pruebas libres para mejorar el coche. Kubica cree que un octavo puesto en Australia estaría bastante bien para comenzar la temporada pero que marcar esos objetivos tampoco dependen de él.

El ganador de un Gran Premio, poseedor de 12 podios y protagonista de uno de los accidentes más graves de la Fórmula 1 moderna (GP de Canadá 2007), no sabe siquiera quién será su ingeniero de pista. Aunque fue uno de los temas principales al firmar su contrato, la situación de espantada en el equipo no ha permitido concretarlo.