Las 24 Horas de Daytona se desarrollaron en un contexto soñado para el equipo Wayne Taylor gracias al trabajo de sus pilotos, en especial a los relevos de Fernando Alonso. Algo impensable en el Roar Before de principios de enero.
El dueño del equipo, Wayne Taylor expresó su alegría tras la victoria que consiguió su equipo en la 24 Horas. Una carrera que ha sido eclipsada por la lluvia desde la decimoquinta hora, banderas amarillas, banderas rojas, salidas de pista, accidentes, que finalmente la organización no decidió continuar.
Taylor, para comenzar decía: “Estoy decepcionado porque, ahora, Jordan ha ganado tantas Rolex 24 como yo, y nunca quise que sucediera”, bromeaba el dueño del equipo. “No puedo expresar con palabras lo grande que es esta victoria para nosotros y hacerlo con este grupo de personas va a ser un recuerdo que nunca olvidaré”.
El gran protagonista a bordo del Cadillac #10 era Fernando Alonso debido a su carrera y su gran mentalidad de correr en categorías y encima de coches que no está acostumbrado, ya que se ha dedicado a los monoplazas toda la vida.
Taylor decía sobre tener al español: “Todo ha ido bien finalmente, me llevó nueve meses conseguir a Alonso”. Mucho se ha comentado, si Wayne fue a Fernando si fue, al contrario, pero el campeón de Daytona en 1996 y 2005 comenta: “Tengo que darle las gracias a Zak Brown por hacerlo posible. Fernando Alonso es uno de los pilotos más impresionantes que he visto jamás”.
Además, pasó algo increíble, Alonso cuando rodaba segundo habló por radio diciendo que en estas condiciones no se podría seguir corriendo. En ese momento, Taylor sintió miedo por el devenir de la carrera: “Cuando le escuché por radio hablando con miedo, me di cuenta de que no íbamos a correr más”, finalizaba. No se acabó la carrera en el momento que pedía Fernando, sino cuando él consiguió el liderato de la primera prueba del IMSA.
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