Guenther Steiner, Director del equipo Haas, habló sobre los problemas que esta teniendo el monoplaza en los test de Barcelona.
Aunque este rodando bastante bien el equipo americano, son los únicos que han sido capaces de provocar cuatro banderas rojas. La mayoría de ellos por problemas eléctricos que causaron la parada del monoplaza.
Romain Grosjean fue el primero en encontrar problemas con el VF-19, ya que tuvo problemas con la presión del combustible en el primer día de las pruebas. En el tercer día, Pietro Fittipaldi estuvo obligado a detenerse por un problema de encendido. El mismo problema afectó al piloto francés más tarde, antes de una última detención del francés en los últimos momentos del día.
Las palabras de Steiner fueron las siguientes:
Fueron los problemas electrónicos los que influyeron en el funcionamiento del motor. El motor ya no podía funcionar de manera segura, así que tuvimos que detenerlo.
Al menos, nada se rompe, como cuando rompes un motor. Eso es peor, pero solo tenemos que encontrar la causa de los problemas y luego nos encargaremos de ello. Pero todavía tenemos tiempo para encontrarlo, por eso no estoy tan desesperado por ello.
Otros de los problemas por lo que tuvo que lidiar el equipo Haas fue cuando se descubrió que el reposacabezas de Kevin Magnussen no encajaba adecuadamente. Al final, el equipo americano estuvo obligado a reemplazarlo por Fittipaldi, el piloto reserva. Dentro de lo que cabe, fue una solución fácil de resolver ya que el brasileño rápidamente se subió al monoplaza para hacer las pruebas asignadas para el día del test.
Solo tuvimos que modificar un poco el reposacabezas y el asiento. Nada grave, era solo adaptación. Ayer, simplemente no había tiempo suficiente para arreglarlo, así que lo hicimos anoche. No fue tan grave, solo que teníamos el riesgo de perder media hora o una hora para arreglarlo durante el día, no tenía sentido hacerlo.
Steiner siguió diciendo que los problemas eran molestos más que frustrantes. Pero se sintió feliz al ver la reacción positiva de sus pilotos con el monoplaza VF-19.
Nos encantaría hacer 160 vueltas, y si pudiéramos, 200. Así que siempre cuando se detiene y pierde el tiempo te quedas con ganas de más. Pero no lo llamaría frustrante, es más molesto que frustrante porque sabemos que el auto está bien. El auto tiene un buen potencial, a los pilotos les gusta, así que eso es bueno. Ahora solo necesitamos resolver estos pequeños problemas.
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